Aridane Hernández Umpiérrez (Tuneije, Las Palmas, 23 de marzo de 1989) vuelve a estar en la mesa del Valencia para ficharle. El canario ya estuvo hace más de un año como una de las alternativas que se planteaba entonces César Sánchez y Miguel Ángel Corona para reforzar la zaga. En Osasuna, aunque se llegó a decir que hubo contactos, nunca tuvieron constancia de ofertas o interés en el central, ya que fue una opción que se esfumó con la salida del ex portero ché de la dirección deportiva. Hasta ahora.
Con José Bordalás exigiendo dos centrales, pues con la llegada, si se produce, de Omar Alderete, Aridane vuelve a la primera línea. Su rendimiento en LaLiga Santander, aunque con algunas sombras, ha sido notable. Hasta la fecha suma 55 partidos disputados en las dos últimas campañas, contando con la total confianza de Jagoba Arrasate.
Por todo ello, su fichaje parece tan complejo como entonces. Entonces, Aridane tenía contrato hasta 2022, pero ahora el canario tiene contrato hasta 2023. Osasuna no va a negociar su salida. Ya ocurrió meses atrás cuando se dijo que el Benfica le quería para su proyecto en Portugal, que se le remitió a su cláusula de 12 millones de euros. Una compensación que ni el Valencia puede ni quiere pagar.