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Doncic, un asesino con cara de niño

Luka Doncic con la camiseta de Eslovenia. Foto: FIBA

Luka Doncic con la camiseta de Eslovenia. Foto: FIBA

Luka Doncic está haciendo unos Juegos Olímpicos espectaculares. Es la primera vez que la selección de baloncesto eslovena se clasifica a esta cita y él no ha dejado pasar la oportunidad para brillar. En solo dos partidos jugados lleva 73 puntos (59% en tiros de campo), 18 rebotes y 12 asistencias. Es el líder anotador del torneo.

Más allá de los números, abruma la facilidad con la que es capaz de dominar los partidos, con buenas lecturas a cada trampa que la defensa rival intenta. Tras endosar 48 puntos a Argentina en el primer partido de Eslovenia en el torneo, el seleccionador argentino, Sergio Hernández declaraba: «No pudimos nunca. Doncic hizo lo que quiso, como quiso. Todo lo que intentamos lo vulneró, ni un segundo pudimos pararlo. Y eso generó espacios para todos. Es muy difícil encontrar un partido con tantos puntos en contra».

Es muy interesante lo que dice Sergio Hernández: «generó espacios para todos». Ese es uno de los grandes problemas cuando tienes que defender a Luka, no es que anote con  mucha facilidad, hace mejores a sus compañeros encontrándoles en buenas situaciones. Scariolo no podrá contar con Garuba, Abalde y Marc Gasol por haber estado en contacto con un positivo de coronavirus. Tres bajas muy importantes y más aún en el apartado defensivo. Por estatura y actividad defensiva, los dos primeros serían una buena opción para defender al esloveno y Marc sería muy inteligente en las ayudas a la hora de cerrar espacios. Al no contar con ellos, parece lógico que Víctor Claver se encargue de su defensa la mayor parte del tiempo, pero no es cuestión de un solo jugador.

España  no puede permitirse que Ricky Rubio esté mucho tiempo en defensa con Doncic porque le necesita en ataque, es el jugador más clarividente de la selección, pero por momentos también tendrá que encargarse de él. Luka controla el balón la mayor parte del tiempo que se encuentra en ataque (al igual que en los Dallas Mavericks), él decide. Lo hace en la NBA y también se le ha visto hacerlo en los Juegos Olímpicos, busca el emparejamiento más favorable para él. En la mayoría de los casos suelen ser los pívots: jugadores más lentos a los que puede sobrepasar en velocidad o anotarles su step back. En la eliminatoria contra los Ángeles Clippers ya dio una clase de como aprovecharse de ello.

En los Playoffs de la NBA, Doncic acusa el cansancio en los minutos finales, en Estados Unidos son 48 minutos y el reglamento FIBA estipula que sean 40. Es difícil pensar que pueda tener problemas de fatiga en los minutos finales, pero como ya hicieron  los Milwaukee  Bucks con Chris Paul, se le debe presionar toda la cancha. De esta forma le obligas a estar protegiendo el balón y a un mayor desgaste, no solo físico, también mental. En el caso de que decida no subir él el balón, negarle una y otra vez la recepción del mismo. Que no se sienta cómodo en la pista.

Eslovenia ocupa muy bien las esquinas, le da amplitud al campo y más espacio a Doncic para atacar el aro y decidir. Es muy importante el lado débil, estar atentos a las posibles líneas de pase que Luka dibuje. Rudy Fernández, Ricky Rubio o Víctor Claver son muy inteligentes para robar esos balones.

Uno de los aspectos que más debe mejorar es su actitud. Habla y protesta mucho con los árbitros, quizás por ese carácter balcánico tan característico y competitivo. Si España consigue que esté centrado en discutir con los colegiados, tendrá mucho ganado. En la NBA es muy típico que le piten faltas técnicas por protestar, algo que en los Juegos ya ha pasado. Todo lo que sea descentrarle y sacarle del partido será mortal para Eslovenia.

Luka ha mejorado mucho la defensa, no es un gran defensor, pero sí uno correcto. En el baloncesto FIBA tiene más ventajas por su tamaño, en Estados Unidos está ventaja casi no existe. Prueba de ello son los 2 robos y 2 tapones que obtuvo contra Japón, pero cometió 4 faltas, el que más de su equipo. Doncic siempre escoge el emparejamiento más sencillo en defensa, para que no desgastarse ni tener problemas de faltas, Scariolo y los suyos deben trabajar para que esto no sea así. Luka debe defender, cansarse tanto física y mentalmente para que luego no esté fresco en ataque y sea más sencillo que cometa errores. A la par que pueda cometer faltas que obliguen a Aleksander Sekulic a sentarle en el banquillo. 

Una de las estrategias habituales en el baloncesto cuando no quieres que un rival tenga el balón es realizarle un dos contra uno, de esta forma presionas en exceso al poseedor del balón, pero dejas a un hombre liberado. Esto con Doncic no suele funcionar. Se trata de un base de 2,01 metros de altura con una muy buena visión de juego, no le es muy difícil encontrar la solución correcta. El esloveno reconoció que es más fácil anotar en la NBA porque la pista es más grande, en la visión de juego pasa lo mismo. Es común ver a los estadounidenses tener problemas a la hora de circular el balón en baloncesto FIBA, Doncic está acostumbrado a hacerlo porque jugó de pequeño en Europa.

En el baloncesto FIBA es superior físicamente, le gusta ir más al contacto que en la NBA, por ello los interiores españoles deben estar muy preparados para ayudar y cerrarle espacios, al igual que los defensores del lado débil. Doncic es un maestro en encontrar al hombre libre.

Luka está haciendo unos Juegos Olímpicos históricos (solo lleva 2 partidos), ha asegurado el pase de su selección a la siguiente fase. Domina como nadie en la competición, los de Sergio Scariolo deberán estar concentrados los 40 minutos. España debe desgastarle física y mentalmente, variando el emparejamiento con él (es extremadamente bueno a la hora de sacar faltas a su defensor). No es un trabajo exclusivo de los exteriores, los cinco jugadores de campo deben estar preparados. Rudy, Llull, Sergio Rodríguez, Willy Hernángomez han compartido vestuario con él, Ricky y Claver le han tenido que sufrir en sus respectivos equipos. Todos saben de lo que es capaz y que es imprescindible frenarle si España quiere pasar a cuartos de final como primera de grupo.

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