La cantera de la UD Las Palmas es una de esas que no para de sacar talento prácticamente todos los años. Cierto que el caso de Pedri González es uno entre muchos, como así ha demostrado el de Tegueste, pero hay otros que con una proyección magnífica y que los clubes, conocedores de la gran cantera existente en el club, ya están siguiendo. Es el caso de Alberto Moleiro (Santa Cruz de Tenerife, 30 de septiembre de 2003).
El interior o mediapunta que todavía no ha jugado más arriba de juveniles en partido oficial, está siendo seguido de cerca por el Wolverhampton Wanderers. Esta pretemporada la ha hecho con el primer equipo dejando unas notables muestras de su calidad a sus apenas 17 años. Su sitio estará en el filial en principio, aunque si Pepe Mel lo reclama jugará y ya se ha visto que el madrileño no tiene problema en poner a los chicos jóvenes.
Pero para que eso ocurra debe quedarse y los Wolves quieren llevárselo. Vienen con dinero encima de la mesa, porque al tener contrato hasta 2023, tendrían que pasar por caja. No obstante la UD Las Palmas no piensa en traspasarlo, sino que quiere renovarlo para evitar su marcha. Las próximas tres semanas se antojan claves, pero mucho dependerá de la propia intención del tinerfeño: si quedarse o irse.