El Tenerife baja de la nube a la Ponferradina
El cuadro de Ramis aprovechó el inicio de la segunda parte para sentenciar un partido que tuvo ocasiones para ambos lados a lo largo de la primera mitad.
El Tenerife continúa sin conocer la derrota. El conjunto chicharrero se llevó los tres puntos de un duelo marcado por la efectividad sumado a las buenas sensaciones que han dejado futbolistas como Shashoua, Gallego o Corredera. La ‘Ponfe’ comenzó el partido con ocasiones pero se fue diluyendo con el paso de los minutos.
Los primeros compases fueron trepidantes. Ambos conjuntos buscaban área rival sin guardar apenas un as en la manga. La primera ocasión fue para los visitantes. El centro por banda derecha de Ojeda era rematado por Naranjo pero ese cabezazo se marchaba rozando el larguero de Soriano. Sin tiempo para asimilar el susto, Naranjo volvió a disponer de otra ocasión inmejorable pero la pelota se iba desviada en el mano a mano ante el meta tinerfeño. Los locales tampoco querían ser menos y tuvieron la primera en el área, pero Copete le robaba la cartera a Elady cuando este iba a rematar sólo.
La posesión cambiaba de lado cada minuto y las oportunidad se sucedían en un tiempo frenético. Yuri enviaba a las manos un lanzamiento desde la frontal y el Tenerife estrellaba la pelota en el larguero en un centro por banda izquierda. En la jugada posterior, Sipcic estuvo a punto de abrir el marcador en un cabezazo a la salida de un córner.
A falta de cinco minutos, Eduardo Espiau iba a tener una doble ocasión para adelantar a su equipo. Primero con un rechace a las manos de Soriano y después enviaba la pelota a la cepa del poste en una internada por el carril zurdo.
En la segunda parte iba a cambiar completamente la película. El Tenerife se adueñó de la posesión y en el primer acercamiento al área rival llegó el primer tanto del partido. El centro desde la línea de tres cuartos era rematado magistralmente por Elady haciendo imposible la estirada de Lucho García.
El Tenerife olió la sangre y se aprovechó. A los pocos minutos llegaba la sentencia con un disparo inapelable de Álex Muñoz que se colaba por el palo corto del meta colombiano.
A partir de ahí el partido de La Ponferradina fue un quiero y no puedo. El cuadro tinerfeño se reordenó atrás y no dejó que los de Bolo tuvieran apenas acercamientos con peligro a la portería defendida por Soriano poniendo la segunda victoria para los muchachos de Ramis en cuatro duelos disputados. La Ponfe continúa en esa segunda posición a expensas de lo que hagan sus rivales pero las tres victorias en las tres primeras jornadas le mantienen entre los ‘elegidos’ de la categoría.