Punto con sabor a poco en La Romareda

Una nueva jornada de la Liga SmartBank se disputó después de que algunos jugadores internacionales volvieran de sus compromisos internacionale. La Romareda recibió a una Real Sociedad B que, con el paso de las jornadas, fue de más a menos con el paso de las jornadas, pero que quiso vencer al Zaragoza y llevarse los tres puntos.

Iba a haber emoción desde el minuto uno y los vascos estuvieron más enchufados que su rival. Tras un despiste defensivo de la zaga del Zaragoza, los realistas combinaron una gran jugada que culminó Magunazelaia a pase Martín desde la banda izquierda y rematar a quemarropa que les permitió adelantarse en los primeros minutos del encuentro. Jarro de agua fría para el aficionado zaragozano, que no paró de animar desde el gol encajado.

No contento con adelantarse en el primer minuto, Xabi Alonso no paró de dar órdenes a sus jugadores para dominar con mayor claridad el esférico y, por ende, la posesión. Lo que no pudo controlar el técnico fue la contestación del Zaragoza: muy activos los jugadores, con una presión muy alta que incomodaba la salida del balón y desencadenando una ocasión detrás de otra en el primer cuarto de hora del partido. Tal fue el esfuerzo de los locales, que tuvo premio el trabajo de los de Juan Ignacio Martínez. Los zaragozanos provocaron un error de la zaga ‘Txuri-urdin’ y el chut de Narváez, con la ayuda de la defensa, puso el empate a uno en el partido.

A partir de ese momento, el Zaragoza volvió al partido y se adueñó del balón, sintiéndose mucho más cómodo, pero no más peligroso que su rival, pues el encuentro pareció un correcalles con ocasiones para ambos equipos. La tuvo en el 27’ Narváez con un tiro que se marchó cerca de la escuadra izquierda, muy cerca de poner por delante a los suyos. Se tuvo que notar de alguna manera el momento de forma de Chavarría, que estuvo enchufado aportando mucho en ataque y en defensa.

Tenía problemas el Sanse para repeler el peligro, que no salía de su área y sufrió de lo lindo para evitar que los locales se adelantasen en el marcador. Se fueron apagando los blanquiazules con el paso de los minutos y se vieron sometidos a un juego vistoso con mucho peligro. Y así finalizaron los primeros 45 minutos en La Romareda, con un resultado que pudo ser mayor.

Comenzó el segundo acto de la obra sin demasiados cambios, ni en el banquillo con cambios ni en el césped con dominador. Se recompuso un poco defensivamente el Sanse en los segundos 45 minutos y supo defenderse de las acometidas de los zaragozanos, que movieron la pelota de un lado a otro sin demasiada idea de cómo hacer daño a la defensa de San Sebastían. Esa imprecisión del Zaragoza para poder ampliar distancias en el marcador la aprovechó el rival, que se fue recomponiendo, detalle del que se dio cuenta la grada, que animaba a empujar un poco más a los suyos.

Empezó la ronda de cambios y movió ficha la Real metiendo en el campo a Alkain y Roberto López por Djouhara y Garrido y el Zaragoza cambió a Álvaro Jiménez por Iván Azón, que se marchó aplaudido por la grada motivado por el gran partido del canterano, y a Mesa por Vada. Los minutos empezaron a pesar y la presión sin balón de los equipos no era la misma que al comienzo. Flojeó notablemente las ocasiones en la segunda parte, poco se vio de ambos equipos, salvo una acción de Chavarría, que forzó una falta para los suyos.

Se complicó para el equipo filial en el césped el final del partido, que se vio con el contratiempo de la expulsión de Ezkurdia, que recibió la segunda tarjeta amarilla y dejó a los suyos con uno menos para los últimos diez minutos, complicándose el empate para el final del partido. Más problemas para Xabi Alonso, que no tuvo oportunidades para sacar a relucir el juego al que tiene acostumbrado el espectador.

Los últimos minutos fue un asedio total de los locales, que supieron hacer sangre en el momento exacto. La más clara de ellas fue cerca del descuento la ocasión de Vada con jugadón de Iván Azón, que se marchó por encima de la portería de Ayesa. Se merecía el Zaragoza un gol que le dieran los tres puntos y dar un subidón en la tabla, pero no le iba a dejar el equipo que tenían enfrente, con un jugador menos y achicando más balones que nunca.

Y con la respiración contenida de los aficionados del Zaragoza en el descuento, no hubo tiempo para culminar la remontada y De La Fuente pitó el final del encuentro. El Zaragoza no pudo pasar del empate frente a la Real Sociedad B en un encuentro donde dominaron y se repusieron rápidamente al gol inicial de Mangunazelaia con el tanto de Narváez. Ambos equipos suman un punto que sitúan al Sanse decimoquinto y al Zaragoza decimosexto con 6 puntos ambos, a uno del descenso.