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La historia interminable de la enfermería taronja

Quinteto de lujo en la enfermeríad de Valencia Basket. Fuente: M.A. Polo (VBC).

Valencia Basket y las lesiones es una historia que desafortunamente para los intereses del club se repite con demasiada frecuencia. Mala suerte, casualidades, coincidencias o cuestionable planificación y gestión médica, sea cuales sean los motivos, lo cierto es que los taronjas están siendo castigados con mucha dureza en este inicio de temporada. Así pues, la ilusión por el renovado proyecto con Joan Peñarroya ha sido menguada temporalmente por las numerosas bajas.

Joan Peñarroya durante el partido de pretemporada frente Casademont Zaragoza. Fuente: M.A. Polo (VBC).

Confianza en L’Alqueria

A pesar de tanto contratiempo, la política del club de la «Cultura del esfuerzo» sigue siendo firme como ya confirmó su director deportivo Chechu Mulero. Se conitnua confiando en los jóvenes de L’Alqueria y no se va a fichar a ningún jugador con contrato temporal.  Cierto es que el equipo está dando buena imagen y afronta los partidos con intensidad. Los jugadores responden a los que les pide el entrenador pero llegan justos de energía. Tal y como se vio, sobretodo, en la segunda parte contra UCAM Murcia. Partido que no pudieron jugar hasta cinco jugadores de la primera plantilla: Xabi López Aróstegui, Klemen Prepelic, Sam Van Rossom, Jasiel Rivero ni Mike Tobey. Un quinteto de plenas garantías para cualquier equipo de Europa, todo sea dicho de paso.

Ahora bien, el listado de bajas es más preocupante si tenemos en cuenta que Martin Hermannsson lleva varias jornadas forzando por problemas en su brazo izquierdo y que Nenad Dimitrijevic y Louis Labeyrie se pasaron casi toda la pretemporada lesionados.

Resumen del parte de bajas ante el Casademont Zaragoza

No obstante, la competición no da tregua y después de la doble jornada de la semana pasada, mañana a las 20:45 espera un Casademont Zaragoza de viejos conocidos como Jaume Ponsarnau, Rodrigo San Miguel o Triggvy Hlinason. Estos sin tener en cuenta a Omar Cook, que se encuentra lesionado pero que su equipo sí ha creído conveniente encontrarle un sustituto (Kenan Sipahi). Lo mismo ocurre con Santi Yusta y la incorporación de Adam Waczynski.

Pero no todo son malas noticias para Peñarroya ya que puede empezar a ver un poco de luz en el túnel de las lesiones con la probable vuelta de Rivero. El cubano ha vuelto a los entrenamientos como así ha mostrado el club taronja a través de sus redes sociales.

Jasiel Rivero de vuelta a los entrenamientos con VBC. Fuente: Valencia Basket.

El siguiente en aparecer y así debutar con su nuevo equipo sería Xabi López-Aróstegui. La realidad es que el Mejor Alero de la pasada Liga Endesa no ha podido tener peor fortuna ya que su lesión de tobillo, además,  le impidió disputar los Juegos Olímpicos de Tokyo. Finalmente, según adelanta la Agencia EFE, la recuperación de su operación del mes pasado sigue por buen camino y podría estar disponible para el partido del 10 de octubre contra el Real Madrid.

Sin embargo, los que tardarán al menos dos o tres semanas más en reaparecer serán Sam Van Rossom (lesión en la musculatura isquiotibial de la pierna derecha), Klemen Prepelic (lesión en el tobillo) y Mike Tobey (lesión en el pubis).

Se repite la historia

Si bien las lesiones son una faceta más en la realidad del deporte de élite y muchas no se pueden evitar, lo que sí se puede controlar es la gestión de la plantilla para compensarlas. Cierto es que es una oportunidad de oro para los jóvenes para ganar experiencia pero los jugadores más veteranos pueden resentirse de ese esfuerzo extra. Y lamentablemente en este aspecto, Valencia Basket ya ha vivido esta historia en muchas ocasiones.

Echando la vista atrás, encontramos la dolorosa temporada posterior a la obtención del título de Liga Endesa. La 2018 con Txus Vidorreta fue un calvario en el tema de lesiones. No hay nada más que recordar que un jugador diferencial como Antonie Diot estuvo toda la temporada arrastrando problemas en su rodilla. Además, la exigencia era máxima al disputar la Turkish Airlines Euroleague y se unieron las bajas de Van Rossom y Guillem Vives. Mulero respondió fichando a un jovencísimo Sergi García que también se lesionó y Vidorreta tuvo que inventarse a Alberto Abalde de base.  Resultado: no clasificarse para la próxima Euroliga y cambio del equipo médico del club.

Sin embargo, no hay que irse tan lejos en el tiempo para encontrase nuevamente con la misma historia. Justo hoy hace un año caía lesionado Joan Sastre y no volvería hasta el 23 de diciembre. Además, su compañero de posición, Vanja Marinkovic sería baja entre el 5 de noviembre y el 5 de enero. La solución fue traer de vuelta de su cesión a Josep Puerto para que contara con una cantidad de minutos realmente residual. Resultado: no clasificarse para la próxima Euroliga.

Así pues, el objetivo marcado a fuego por todo Valencia Basket y sus aficionados es ganar la 7DAYS Eurocup para volver a la máxima competición europea. Tarea ni mucho menos sencilla aun teniendo a todo el equipo al completo. Por lo tanto, si no se quiere repetir la historia, el club taronja deberá máximizar la gestión de la enfermería y dotar de los recursos necesarios a un entrenador que ha contiagiado de carácter e intensidad a sus jugadores.

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