Dani Martín fue uno de los grandes héroes del punto, muy valioso, logrado en Zorrilla el pasado viernes. El portero asturiano llegó este curso a Málaga con la aparente vitola de titular y claramente avalado por José Alberto López. El técnico asturiano lo tuvo muchos años en el Sporting. Le ha visto crecer cuando era el número 1 ó 2 de su generación en las inferiores de la Selección. También vivió su salida de Gijón, con un bronco choque con el que fue su club toda la vida ante la falta de minutos por la competencia fuerte con Diego Mariño. Su venta al Betis le dio al equipo gijonés cinco millones de euros.
Las lesiones lastraron al portero asturiano en Sevilla. Necesitado de minutos, aceptó ir cedido al Málaga. Sus comienzos fueron complicados. Dani Barrio jugó bien los primeros cuatro partidos, pero Dani Martín venía para ser titular y para jugar. Así, contra el Girona en la quinta jornada, José Alberto apostó por Dani Martín, donde cumplió muy bien e incluso realizando un par de notorias y claves intervenciones.
Pero en los siguientes partidos en Ponferrada y Gijón le convirtieron en el centro de las críticas de la afición malaguista. Muchos aficionados y parte de la prensa criticaron, quizá con una vehemencia nada merecida, sus actuaciones y recordando los primeros cuatro sobrios partidos de Dani Barrio. Sin embargo para José Alberto no había debate; Dani Martín es su portero, él lo avaló y sus posibles errores no eran suficientes para sacarlo del once.
Sus paradas contra el Fuenlabrada dieron alas a su equipo para salvar los tres puntos. Y en Valladolid, tres cuartos de lo mismo. Fue el causante de que el Málaga obtuviera ese valiosísimo empate. El gijonés ha respondido e incluso callando bocas. Muchos de los que le criticaron, pues solo hay que mirar atrás en las redes sociales, ahora le aplauden y reconocen que, quizá, su crítica fue prematura. Y es que Dani Martín ha pasado de villano a héroe en dos semanas.