Nadie duda de que el buen arranque de liga que tiene líder a la UD Almería tras la jornada 9 se debe, principalmente, al gran nivel mostrado por el tridente Sadiq-Ramazani-Robertone. Aunque la plantilla indálica está plagada de talento y lo desborda por los poros de su piel, el nivel de estos tres jugadores ha hecho que, cuando el juego no es tan coral como se quiere, lo desatasquen con creces. Por algo el equipo de Rubi es el único equipo que ha ganado seis partidos de nueve jugados.
Pero el técnico catalán ya avisó tras el amargo empate del sábado frente a la UD Las Palmas, que ahora venían semanas complicadas. A falta de las pruebas médicas, se intuía que Ramazani y Robertone se habían caído para un tiempo. Ese tiempo ahora se estima que será de unas cuatro semanas por sus lesiones en los isquiotibiales. Ramazani sufre una lesión muscular en los isquiotibiales de su pierna izquierda, mientras que Robertone tiene lo mismo, pero en los de la derecha.
Se trata de dos bajas muy sensibles en los esquemas del catalán, sobre todo por sus estados de forma. No en vano, sus ausencias ya se notaron en la última media hora del último partido, cuando el Almería dio un paso atrás y encajó el tanto del empate in extremis. Ahora se les espera que estén fuera entre cinco y seis partidos. Los partidos frente a Eibar (f), Sanse (c), Mirandés (f), Leganés (c), Sporting (f) y Burgos (c) son los que podrían perderse, dado que habrá dos jornadas entre semana en Octubre y la primera semana de Noviembre.
En su lugar todo apunta a que Lazo y Curro Sánchez sean los primeros espadas de Rubi para cubrir sus puestos. No obstante, el viernes en Eibar se comprobará.