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Los objetivos a corto plazo de Javi Pereira

Este miércoles, Javier Pereira aterrizó de lleno en la órbita del Levante. Su objetivo: lograr la permanencia del club granota y sacarle de la espiral negativa que le tiene metido en la zona baja. Pero para que en el mes de mayo eso se haya logrado, el técnico tiene una serie de cosas que lograr mucho antes. Si lo hace ese objetivo a largo plazo será muchísimo más fácil de conseguir que si no lo hace.

Si algo se ha notado en estos partidos anteriores, es que hay jugadores muy lejos de su nivel. El estado anímico influye más de lo que parece y esa será labor de Javi Pereira. Que los jugadores vuelvan a estar bien en el plano mental es clave para que también luego lo hagan en el terreno de juego con sus habilidades con balón (o sin él). Esto irá, en gran medida, solo si se sacan buenos resultados. Pero el técnico debe ir más allá para lograrlo incluso aunque estos tarden en llegar.

No encajar es el mejor método para empezar a sumar. Bien de uno, asegurado si no encajas, o de tres. La realidad es que es imposible salir de la zona de abajo con la cantidad de goles que recibe el Levante. Javi Pereira, como es más que lógico, lo sabe. Es bastante probable que veamos, al menos en sus primeros partidos, un Levante mucho menos alegre en defensa y que priorice el no encajar al irse hacia arriba. El que el equipo defienda bien, porque las cifras dejan claro que no lo hace, es el primer gran reto de Javi Pereira.

Esto va unido al punto anterior sobre el aspecto anímico y mental. Es algo que Pereira debe lograr que sus futbolistas alcancen su mejor nivel. De ello dependerá que el equipo salga de abajo o esté peleando por salir de los puestos de descenso durante toda la temporada.

Otro de los grandes ‘debes’ del Levante en esta campaña está siendo el perder tantos puntos en los minutos finales. Cádiz, Real Madrid y Rayo Vallecano le quitaron puntos que ya tocaba con la yema de los dedos en los minutos finales. Que en los minutos finales el equipo sepa sufrir para mantener un resultado apretado o, en el caso contrario, si es él quien necesita rescatar algún punto en esos minutos lo logre. Esa enseñanza el Levante parece haberla perdido y le tocará a Javi Pereira recuperarla.

Por último le queda al nuevo entrenador del Levante lograr volver a enganchar a la grada. La parroquia granota, tradicionalmente, no ha sido muy elevada, pero sí muy fiel. Ahora la situación ha hecho que esa masa social haya aumentado, pero sea más volátil y si no hay resultados o un juego que enganche no va y sino va no hay apoyo. Ahora que los espectadores vuelven a las gradas, el Levante no puede permitirse estar falto de aliento en el flamante Ciutat de Valencia.

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