Fútbol a raudales en Balaídos

Balaídos vivirá este jueves un encuentro marcado por 2 contendientes que destacan por el buen trato al esférico. El Celta recupera al soporte de su esquema, el peruano Renato Tapia, tras más de 3 semanas en el dique seco, envuelto en una polémica por su innecesario viaje a las Américas en el último parón de selecciones. Peor son las cosas para los donostiarras con media docena de jugadores en la enfermería.

Una Real Sociedad que, sin embargo, lleva más de 2 meses sin caer en ninguna de las competiciones en las que está en liza. Acumula 7 victorias y 5 empates desde que fuera derrotado por el Barcelona en el Camp Nou en la apertura del telón liguero allá por el 15 de agosto.

Fieles a su idea de cantera, con un entramado nutrido en Zubieta, abanderado por el internacional Mikel Oyarzábal -enésima víctima del virus FIFA tras la disputa de la fase final de la Nations League a mediados de mes- y comandados por un Imanol Alguacil, que les llevó a lo más alto 34 años después del anterior entorchado, tras imponerse al Athletic en la final en diferido de 2020, aplazamiento motivado por la irrupción de la pandemia del Covid-19.

Tras los empates de Sevilla y Real Madrid en la jornada del miércoles, una igualada los pondría encabezando en solitario la tabla liguera. Tras la derrota en A Nosa Reconquista en 2019, los Txuri Urdin llevan 2 victorias consecutivas en el feudo céltico, tras pegar sendas puntillas a los técnicos Fran Escribá hace 2 años exactamente (0-1) e infringirle un severo correctivo al cuadro de Óscar García el pasado 1 de noviembre (1-4).

Ese enfrentamiento previo fue la antesala de la llegada del Chacho Coudet, quien pudo ganarse al celtismo -áun más si cabe- en la rueda de prensa de este miércoles con perlas tan llegables al entorno celeste como «me gusta hablar de fútbol con personas, no con computadoras», «el club me ha dado todas las herramientas», «¿vas a un club grande o intentas hacer más grande un club? elegí lo segundo» o «no tengo con quien charlar, los agarré de psicólogos».

Y es que el Celta llega con la autoestima por las nubes, tras ganar en esa particular visita al dentista, que viene siendo el hecho de jugar en el Coliseum Alfonso Pérez, con un contundente 0-3, con doblete de Santi Mina y el reencuentro de Iago Aspas con el gol. Con lo que afronta este encuentro con mejores sensaciones que las dejadas en anteriores encuentros.