El Leganés asalta el Alcoraz

 
El encuentro empezó bronco con poco ritmo. Era perceptible en ambos conjuntos la necesidad de sumar y los riesgos eran pocos, casi ninguno en los primeros instantes. La dureza era patente y los oscenses se cargaron muy pronto con dos amarillas; Mosquera y Salvador recibieron la cartulina por dos duras entradas. Ninguno de los dos equipos escatimaba en ir al choque, algo que se echaba en cara en el seno ‘pepinero’. 

Destrucción sobre creación 

La falta de ideas se imponía en el Alcoraz. Los huecos no se encontraban por ningún lado, especialmente en el mediocampo. Los centros laterales primaban sobre el juego combinativo. Tablas en todos los aspectos. Conforme pasaban los minutos el ‘Lega’ trataba de ser más protagonista a través de circulación del tándem Gaku/Fede. Los blanquiazules bajaban revoluciones a través del cuero; sin embargo las situaciones de peligro no se generaban. 

En banda derecha iba a llegar el primer ‘susto’ del partido con una volea mordida de Arnáiz. El Leganés se iba asomando poco a poco a las mediaciones de Andrés Fernández. A pesar de ello, el Huesca iba a despertar y Mikel Rico impactó un disparo potente que rechazó la zaga madrileña. Posteriormente, Florian iba a tener la ocasión más clara del primer envite tras un cabezazo que detuvo Riesgo. Era un encuentro de ritmo cambiante, alternándose dinámicas por parte de los dos equipos. Eso sí, los locales iban a llegar al descanso con mayor presencia en campo rival. 

Tras el paso por vestuarios, Nafti optó por dar entrada a Garcés en detrimento de Juan Muñoz, su participación en el juego fue nula. De esta manera, el canterano del Atlético iba a tener 45 minutos para ganarse con goles el perdón de la parroquia leganense. La segunda parte iba a tener el mismo guión que la primera: poco fútbol e interrupciones constantes. Para revertir estas situaciones tan previsibles, Xisco metió a Seoane, máximo goleador del equipo. Las llegadas del madrileño podrían ser una gran alternativa para desnivelar la balanza en favor de las suyas. 

Golazo de Randjelovic a pase de Vico

Los del Sur de Madrid fueron reculando poco a poco con el paso de los minutos, proponiendo un encuentro más basado en el contraataque. En este planteamiento el rol de Lazar, un velocista puro, se antojaba clave para aprovechar estas transiciones. Precisamente, el serbio iba a ser el encargado de abrir el marcador en . Una sutil vaselina que entró ‘llorando’ en la portería tras tocar en el larguero iba a suponer el 0-1. La asistencia previa de Fede Vico, un auténtico escándalo. Una vez más, y ya no sorprende, el andaluz es el faro sobre el que órbita todo el juego de los suyos. 

El tanto supuso un auténtico mazazo para los aragoneses, incapaces de sobreponerse ante este nuevo contexto. La precipitación era la tónica habitual ahora. Por su parte, el Leganés se encontraba muy cómodo en este nuevo escenario. Cerraba espacios atrás y buscaba la sentencia a partir de una contra. El Huesca, muy gris en todo momento, trataba de crear peligro a través de posesiones largas pero era todo muy imprevisible. 

No obstante, Riesgo estuvo a punto de meter en un riesgo serio a su equipo, nunca mejor dicho. Una salida suya en falso propició un disparo de Ferreiro que, con todo a favor, mandó el balón al lateral de la red. Los pupilos de Xisco siguieron acosando la puerta visitante pero iba a ser el Leganés el que iba a sentenciar en el minuto 85. Falta botada por Gaku, prolongación de Lazar y Borja anotaba a placer. El illense se reencontraba con el gol y el Leganés con la victoria. Tres puntos vitales.