Muchos ojos están pendientes de una decisión que debe tomarse en Lezama. En la dirección deportiva del Athletic llevan tiempo planteándose el fichaje de Iñigo Ruiz de Galarreta (Donostia, 6 de agosto de 1993). El mediocentro donostiarra es un jugador sobre el que el propio Rafa Alkorta reconoció tiempo atrás el interés por el escaso nicho de mercado que tiene el club zurigorri. Su gran papel, siendo clave, en el ascenso del RCD Mallorca, llamó ya la atención en Ibaigane el curso pasado. Pero ese ascenso impidió ante la evidente negativa mallorquina a negociar, cualquier movimiento.
Ese escenario ahora puede cambiar. El donostiarra no está teniendo el mismo protagonismo para Luis García Plaza. Solo ha disputado la mitad de los minutos, dejando de ser esa pieza indiscutible. Por ello, según la Cadena SER, el Athletic valorará en las próximas semanas el intentar su incorporación. Con contrato en Mallorca hasta junio de 2023, es evidente que si en Bilbao lo quieren, tendrán que pasar ineludiblemente por caja para lograrlo.
Pero ahora mismo en el Athletic hay otro problema. Sin dar una salida no podría llegar Ruiz de Galarreta. Esa salida sería probablemente la de un Mikel Vesga (Vitoria, 8 de abril de 1993) cuyo protagonismo está siendo muy inferior con Marcelino este curso. Apenas ha disputado 249 minutos y solo dos encuentros como titular. Ahí es donde, según la información de la SER, aparecería el Sporting de Gijón; y es que el club gijonés estaría interesado en su cesión para la segunda vuelta del curso ante los problemas físicos de Christian Rivera que deja a David Gallego con solo tres mediocentros (Gragera, Pedro y Nacho).
Éstos se reparten todos los minutos, lo que supone un extra de físico. La llegada de Vesga daría una opción más al medio con un jugador que conoce el club. El vitoriano ya estuvo cedido en 2017 jugando 1.411 minutos en 17 partidos. No pudo evitar el descenso, pero su nivel de juego dejó muy grata imagen en Gijón, siendo un jugador que aún agrada en la afición sportinguista. Todo depende de si en Bilbao se mueven, pero en Gijón están atentos a una operación a tres bandas.