Volvía el fútbol a Old Trafford y lo hacía ni más ni menos que con el gran derby de Manchester. Veríamos de nuevo a Cristiano Ronaldo enfrentandose a un equipo entrenado por Pep Guardiola.
El United llegaba después de una buena victoria en liga frente al Tottenham pero esta vez no contaría con Cavani arriba ya que el charrúa sería baja al igual que el francés Varane. Solskjær volvería al 3-5-2 que le funcionó en Londres pero esta vez no tendría el mismo resultado.
Por su parte, Pep llegaba trás una dura derrota en casa contra el Crystal Palace donde Laporte fue expulsado. En el banquillo dejaría a jugadores como Jack Grealish o Sterling, mientras Foden llevaría el ritmo del partido.
La primera la tendría el United. Una falta que sacaría desde la banda izquierda Bruno Fernandes encontraría la cabeza del inglés Maguire y el balón saldría desviado por poco.
Era el minuto 6 de partido y trás un paradón de De Gea a un tiro cercano de Gundogan, el rechace llegaría a los pies de Rodri que abriría en banda a Joao Cancelo, el portugués centraría y el balón acabaría entrando en propia puerta después de un mal despeje del central Bailly. Llegaría el 0-1 en Old Trafford por una de las bandas donde más fácil lo han tenido los “citizens” para crear peligro durante todo el encuentro.
Corría el minuto 25 y llegaría el ataque más peligros del United trás una bolea peligrosa de Cristiano que pararía sin problemas el portero “sky blue”.
Parecía que los “red devils” podrían lograr el empate pero era una simple ilusión. Phil Foden entraría a sus anchas por la banda izquierda, una vez más, llegando su centro a los pies del belga De Bruyne que erraría el tiro gracias al despeje de Lideloef, el rechace llegaría a Gabriel Jesus que tiraría a puerta rapidamente pero su tiro sería despejado por De Gea.
No veíamos más que un asedio de los de Guardiola donde el español De Gea salvaba al equipo una tras otra.
Cuando parecía que nos iríamos al descanso con un solo gol, Cancelo centraría de nuevo con peligro, mientras Maguire y Shaw dejaban pasar ese balón que pasaba por su lado, Bernardo Silva lo remataría haciendo que un flojo De Gea no despejara ese tiro. Llegaría el 0-2 a favor del City donde los de Solskjær volvían a ser una vergüenza en defensa un partido más.
La segunda parte podría incluso haberse evitado. El City solo movería el balón a su gusto manejando el resultado y evitando que el United no hiciera ni una ocasión peligrosa de gol. Lo único destacado fue el tiro al palo de Foden cuando estaba terminando el partido.
Después de este nuevo ridículo del United quizás despedirán al noruego ya que se ha visto que el equipo le viene muy grande y la afición ya se ha quedado sin paciencia alguna.
Escrito por @DeividMatthews en Twitter.
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Fuente de las fotos: Cuenta Oficial Premier League en Twitter.