El Zaragoza pasa ronda con suficiencia

No tuvo grandes problemas el Real Zaragoza para lograr su clasificación a la tercera ronda. Fue bastante superior al Burgos y los goles de Eguaras y Adrián, uno en cada tiempo, fueron una losa que el cuadro castellano no fue capaz de levantar. Eso y un partido completo y bastante coral del equipo de JIM, que sigue trasladando buenas sensaciones a pesar del serio revés de Almería, le dieron un pase más que merecido en la Copa del Rey.

El Real Zaragoza salió bien al partido. El Burgos no le disputaba la pelota y el cuadro maño buscó desde bien pronto la portería de Alfonso Herrero. Ángel López e Iván Azón fueron protagonistas de las primeras acciones de peligro que acabaron en remates sin apenas peligro. Poco a poco el Burgos pareció querer estirarse, pero no lograba inquietar a Álvaro Ratón, que pasó todo el primer tiempo casi inédito y solo tuvo que atajar -sin problemas- un disparo flojo de Rober Alarcón.

A partir del minuto 25 comenzó el cuadro de JIM a verse ya bastante superior en el campo y crearle problemas al Burgos. La defensa blanquinegra se afanaba en rechazar las llegadas, pero superada la media hora un disparo colocado de Eguaras, haciendo gala de su gran pie derecho, se colaba cerca del poste batiendo a Alfonso Herrero y haciendo justicia a los méritos. Un gol que además no hizo otra cosa que aumentar el dominio local ante un cuadro visitante que estaba noqueado, pero que sobrevivió con la mínima desventaja en el marcador hasta el descanso.

Los de Julián Calero estaban necesitados de reaccionar en el segundo tiempo. Pero los blanquinegros se encontrarían prácticamente de salida con el 2-0. Ese lo lograría Adrián con un buen zurdazo al que no pudo responder Alfonso Herrero. Pudo, de forma inmediata y por dos veces el Burgos, a remates de Miguel Rubio y Guillermo, recortar distancias, pero no encontraron portería. Si lo encontraba un disparo de Claudio en un mano a mano con Álvaro Ratón que el portero gallego del Real Zaragoza evitó con una gran parada. El triple cambio que Julián Calero había hecho había reactivado a un Burgos que, ahora sí, era quien mandaba sobre el ‘verde’ de La Romareda.

Sin embargo ese empuje del Burgos fue como una botella de cava y pronto empezó a perder fuerza. El cuadro maño aguantó su peor momento y volvió a poner el ritmo de partido que le interesaba. Pasaban los minutos y no había ocasiones, lo que claramente acercaba al Zaragoza a tener ‘bola’ en los dieciseisavos de final. Miguel Rubio, en un córner, tuvo el 2-1 en el minuto 80. Remató solo y a placer, pero muy centrado para fortuna blanquilla y de un Álvaro Ratón que solo tuvo que embolsar el balón.

Fue la última oportunidad burgalesa de meterse en un partido y en una eliminatoria que acabó siendo casi plácida para los maños. Éstos estarán en el sorteo de la tercera ronda, o dieciseisavos, que se disputará en los primeros días de 2022.