El Atlético Baleares ya busca en el mercado invernal fortalecer su plantilla para seguir manteniendo ese estatus real de gran candidato al ascenso a LaLiga SmartBank. A la llegada hace ya más de un mes de Carlos Abad para competir en la portería, se va a unir tan pronto como la competición se detenga por el parón navideño, la de Víctor Pastrana. El extremo del Extremadura UD llegará ocupando la ficha de un Isi Ros que no ha cuajado en Palma y que tanto club como jugador han visto que lo mejor es su salida.
Pero aún habrá, al menos, otro fichaje más. Uno sobrevenido por la lesión hace semanas de Iñaki Olaortua, que estará de baja hasta casi la primavera y que deja muy mermada de efectivos la defensa de Xavi Calm. Es necesario un central y el equipo peina en el mercado de jugadores que puedan salir de equipos de la categoría de plata. Jugadores con pocos minutos que acepten salir una categoría por debajo para poder jugar más. Ahí, el propio club ya hace sus pesquisas y una de las puertas a las que habría llamado sería la de Miguel «Míchel» Zabaco Tomé (Burgos, 6 de febrero de 1989).
El defensa burgalés no es titular habitual con el Burgos este año, aunque sí dispone de minutos (839 en 11 partidos, 9 como titular) con cierta frecuencia. Su salida se antoja complicada, pero el club balearico habría sondeado esa posibilidad de forma reciente. Zabaco, que cuenta con una dilatadísima experiencia de 283 partidos jugados en la antigua Segunda ‘B’ a lo largo de 11 temporadas, sería un refuerzo de lujo para la zaga blanquiazul. Sin embargo, al menos a día de hoy, las posibilidades de ficharle parecen escasas aunque todo dependería de como evolucione el mercado invernal.