Mariño no fue suficiente

El Real Valladolid duerme como líder de LaLiga SmartBank al vencer, con total justicia, a un Sporting que fue claramente de más a menos. Tras un primer tiempo con dominio local, pero parejo y sin apenas ocasiones, en el segundo la ambición pucelana pudo con un Sporting al que Mariño sostuvo mucho tiempo, pero que no fue capaz de sostenerle hasta el final. Roque Mesa, que falló un penalti, tuvo su redención minutos después para ser quien dejase los tres puntos en Zorrilla.

La primera parte del choque no tuvo grandes ocasiones. Tuvo muy pocas y, con excepción de un disparo potente de Djuka sin problemas para Masip, todas locales. Era un partido de altas revoluciones, con mucho ritmo y dinamismo, pero las defensas lograban imponerse casi siempre a los ataques. Lo intentó más, al tener balón y exponer más el cuadro de Pacheta, que en la cabeza de Weissman y en las subidas casi continuas de Nacho tuvo sus mejores ocasiones para adelantarse, pero sin crearle problemas a Mariño en el primer tiempo.

El Sporting aguantó bien el envite y planteó su partido con un cambio de esquema claro cuando tenía el balón. Buscaba siempre salir de forma muy vertical, con espacios, pero adoleció de precisión. Pedro Díaz y Fran Villalba se mostraron imprecisos para buscar a un Djuka gris, pero sobre todo a un Aitor García que entraba por todo el campo buscando un resquicio. En defensa supo aguantar, incluso cuando el Valladolid lograba salir con ventajas, mostrándose atentos. Tal era la intensidad que Guille Rosas tuvo que decir adiós anticipadamente por lo que apunta a ser una rotura muscular.

Tras el descanso el Valladolid le metió no una, sino varias marchas más ante un Sporting que solo se encomendaba a sufrir. Ya a los 30 segundos, Cristo se queda solo ante Mariño que saca con el pie lo que era el 1-0. Aunque Djuka logró responder cuatro minutos después con un disparo que se fue por poco arriba, el segundo tiempo sería un monólogo blanquivioleta. Un activo Cristo lo intentaba de todas las maneras, pero no tenía su día. Pero el tanto percutir de los locales les daría una ocasión inmejorable al minuto 59 con un penalti de Bogdan sobre Toni Villa que Roque Mesa lanzó, pero Mariño adivinó para salvar el gol local ante la decepción de Zorrilla.

De todos modos el cuadro local no se vino nada abajo. Cristo de nuevo volvió a encontrarse con un Mariño nuevamente salvador. Sin embargo el Sporting no salía de su campo y de tanto insistir en un saque de banda que pilló a varios jugadores rojiblancos «a uvas», el balón llegó a Roque Mesa que tuvo tiempo suficiente para armar un disparo con bote previo pegado al poste ante el que ya no pudo hacer nada el portero rojiblanco.

Era de justicia, aunque el Valladolid aún le quedaba cerrar el partido. El Sporting no le quedó más remedio que irse hacia arriba, algo que hizo con más corazón que cabeza, pero que tuvo oportunidad para el empate. Primero en un disparo alto de Aitor García y ya en el añadido un testarazo de Babin que le salió a las manos de Masip. No se movería el marcador y el Valladolid duerme líder al lograr mantener su fortín una semana invicto, mientras que el Sporting se queda en tierra de nadie.

Ambos enfilan ya una semana algo más larga para ambos hasta su próximo compromiso. Para los vallisoletanos será el domingo 5 de febrero a las 14:00 horas en el Fernando Torres de Fuenlabrada. Para los gijoneses el sábado 4 a las 20:30 horas frente a una SD Eibar que podría llegar a Gijón como líder de la categoría según lo que acontezca en lo que resta de jornada.