No hay ningún refrán que anuncie si las terceras partes son buenas o malas, pero en el caso del Sporting y de Jonathan «Jony» Rodríguez Menéndez (Cangas del Narcea, 9 de julio de 1991) la vivirán. El extremo zurdo vuelve al cuadro rojiblanco en calidad de cedido por la Lazio, donde no contaba desde verano para Maurizio Sarri, quien no le otorgó ficha. En los últimos días, la buena relación entre el presidente, Javier Fernández, y el jugador -quien vuelve perdonando una buena parte de su salario en Roma-, hizo que la negociación se intensificase y se cerrase en una cesión hasta final de temporada.
Las claves para que Jony haya podido volver al Sporting en este mercado son varias y que se han sucedido todas de forma favorable al cuadro gijonés. La primera viene por el pleito que el Málaga CF le planteó al jugador y al club romano y que perdió. Al no tener que abonar cantidad alguna ninguna de las dos partes al club costasoleño, Jony ya era libre de poder buscar un destino en el mercado, algo que, con la incertidumbre del proceso judicial abierto, no le era viable antes.
La segunda han sido las ganas del futbolista por volver a la que siempre ha considerado su casa. Sin jugar un solo partido desde la temporada pasada, es evidente que llegará falto de ritmo competitivo, por lo que David Gallego tendrá que ir introduciéndolo paulatinamente en el equipo. Pero la calidad del refuerzo, con un jugador que se afianzó en Primera División con 130 partidos logrando 12 goles y dando 23 asistencias, es indiscutible para un Sporting que quiere aferrarse a sus opciones de llegar al play-off.