El Sporting, hasta la pasada semana antes del partido de Butarque, figuraba en las estadísticas que ofrece LaLiga como el cuarto equipo que más tiros totales realiza y el quinto que más llegadas a área contraria contabilizaba. Una estadística que no muestra como un equipo que genera tanto marcha tan mal en la clasificación. Para encontrar una explicación a eso hay que encontrar el punto opuesto. Y es que en su propia área es el equipo que más remates en ocasiones a balón parado y que más centros al área concede.
El Sporting lidera esa estadística, que explica en parte su endeblez defensiva, lo que unido a su poco acierto ofensivo explica que una temporada que comenzó ilusionante se haya transformado en una tétrica pesadilla por evitar un descenso fuera del fútbol profesional que, desde la creación de LaLiga, no ha sufrido. Pero otra de las estadísticas que lidera y que además causa una enorme molestia en el club es la de los penaltis. En lo que va de temporada solo le han señalado dos penas máximas a favor. Fueron en Málaga y Miranda de Ebro y tras sendas revisiones de VAR. Porque para encontrar el último penalti señalado ‘in situ’ en el campo hay que remontarse 380 días atrás.
Fue el 7 de marzo de 2021, en El Toralín. Entonces, en el minuto 37 de partido, Caro derribaba a Pablo Pérez y el extremeño Hernández Maeso no dudó en señalar el claro penalti. Desde esa fecha, los demás penaltis, solo cuatro en algo más de un año natural (vs Mallorca, 14-Mar-21; vs Mirandés, 4-Abr-21; vs Málaga, 9-Ene-22 y Mirandés, 12-Feb-22) y todos han sido señalados tras revisión de VAR. Algo que contrasta con lo vivido en contra; ya que se le han señalado ocho penaltis en contra, seis de ellos in situ en el campo por los árbitros.
Queda claro que la situación deportiva del Sporting no es culpa de los arbitrajes en el campo ni de las revisiones de VAR. De hecho, de no ser por éstas, la estadística sería mucho más tétrica para los rojiblancos. Pero que se trata de una ‘piedra’ más en el tortuoso camino que el equipo lleva viviendo el último año, también queda claro. Como se acostumbra decir, la ‘suerte arbitral’ no está siendo nada favorable al Sporting.