Héctor Hernández suele hablar claro cuando pasa por rueda de prensa y lo ha vuelto a hacer este miércoles. El lateral blanquiazul reconoce que el equipo tocó fondo en Badajoz y tuvieron que decirse «cuatro verdades» en el vestuario, pero también que ha notado un cambio desde entonces y ante la Cultural se consiguió un triunfo que era innegociable. El Deportivo afrontará el próximo domingo el partido ante el filial de su máximo rival regional, el Celta de Vigo, en el Estadio Abanca-Balaídos.
Sobre el escenario habló el blanquiazul. «El año pasado jugamos en Barreiro y no se nos dio nada mal. Como opinión personal, yo prefiero jugar en Balaídos que en Barreiro. No sé cuales han sido sus argumentos para jugar ahí, pero bienvenido sea. Estamos preparados». A este duelo se llega tras un triunfo vital ante la Cultural. «Era un partido importante, veníamos de derrota muy dolorosa y había que ganar por lo civil o por lo criminal. No importaba tanto el cómo, sino los tres puntos. A partir de ahora debe ser un punto de inflexión y afrontamos con ganas el final de temporada».
También tuvo palabras para lo vivido en Badajoz. «Al día siguiente nos habíamos dicho dónde pensábamos que estaba el origen del error. A partir de ahí nos juntamos todos, hablamos las cosas a la cara y el mensaje fue bastante claro. No podíamos dejar pasar más oportunidades. Está todavía a nuestro alcance y esa es la mentalidad. No podemos fallar más. Era el momento de mirarnos a la cara y decirnos cuatro verdades. Hay que salir con el cuchillo entre los dientes».
El lateral quiso seguir la línea de su míster Borja Jiménez: Me reafirmo en las palabras del míster. Era muy difícil pasar del peor partido de la temporada a jugar el fútbol que todo el mundo desea. Que fuéramos vistosos, ganar y convencer… eso era imposible. Había que ganar y he notado en sensaciones, entrenamientos e intensidad, ese cuchillo entre los dientes. Esa es la línea a seguir hasta final de temporada».