Adrián López Álvarez (8 de enero 1988), el delantero asturiano llega para el final de temporada como la esperanza blanquiazul de cara al ataque y a los goles. Asimismo, vuelve a la que fue su casa, La Rosaleda, tras casi dos años sin equipo. El sueldo para el Málaga y Adrián no ha supuesto un problema, llegando a buen puerto. El jugador ha tardado en hacer oficial su fichaje porque se estaba recuperando de una lesión que ha tenido estos meses atrás. Tras recuperarse se ha entrenado individualmente primero, y poco a poco se fue uniendo al entrenamiento en grupo.
En La Costa del Sol, jugó durante la temporada 2008/2009 por cesión. Los 28 partidos que disputó y los 3 goles le sirvió para seguir creciendo. Aunque, no parezca que fue su mejor año en Málaga, hay que recordar que tiene parte de su familia viviendo en la capital costasoleña. Además, sería una buena forma de reencontrarse con su «yo joven» que vieron crecer los aficionados boquerones.
Inicios de Adrián
Sus inicios fueron en el club asturiano, el Real Oviedo, con tan solo 17 años. Por aquel entonces, estaba en Segunda B, lo que ahora es Primera RFEF. En el verano de 2006 fichó por el Deportivo de la Coruña, que jugaba en Primera, un salto de gran nivel como profesional. Pero, demostró su valía con gol en Liga contra el FC Barcelona. La siguiente temporada se fue cedido en el mercado de invierno al Alavés, en Segunda, anotó 3 goles que ayudaron al club a mantenerse en la categoría de plata.
Y aquí fue cuando llegó a Málaga, y donde su vida a nivel personal más que profesional cambió por completo. Tras su etapa como blanquiazul, volvió al Depor en 2009, y esta vez sí se consiguió afianzarse como titular. Pero, no pudo evitar que el equipo gallego descendiera en la temporada 2010/2011. Tras un episodio controvertido con su contrato, daría el mayor salto a nivel profesional.
El gran salto como profesional
El Atlético ficha al jugador el 28 de julio de 2011, de esta manera estaría en su momento más álgido de su carrera. Ya que con este club conseguiría en 2012 la UEFA Europa League y la Supercopa de Europa. Al año siguiente consiguió la Copa del Rey y en 2014 la ansiada Liga. En esta etapa disputó 143 partidos y marcó 26 goles. Tras estar en el Atlético, pasó por Villarreal, Oporto, donde consiguió la Supercopa de Portugal, y recientemente recaló en el Osasuna.
En la Selección Nacional
Con la selección española, destacó sobre todo en las categorías inferiores, consiguió ser bota de plata en el Mundial sub-20 de 2007, 5 goles en 5 partidos ya que cayeron en cuartos. Ya en 2011, fue campeón de la Euro sub-21 y bota de oro con 5 goles.
No obstante, en la absoluta no le fue tan bien, ya que jugó solo dos partidos. Aún así consiguió hacer un gol, nada más ni nada menos que en su debut ante Serbia en 2012.
¿Que le aportaría al Málaga?
Es un delantero centro, y que tiene gol, algo que le ha faltado al Málaga hasta el momento en esta temporada. Por tanto, aumentará el nivel de ataque, algo que demandaba la afición y que hasta ahora se daba de manera escasa. Además, es un jugador que vuelve a segunda con mucha más experiencia. Pero, Adrián no solo tiene gol, también es capaz de regatear, tiene desborde y una gran visión de juego, por lo que se asocia con facilidad con el resto de sus compañeros, un gran fichaje que ilusiona a cualquier aficionado, y por su puesto a los malagueños.
Adrián llega para el final de temporada, mejorando así la zona de ataque con sus goles y su experiencia. Por todo ello, el jugador asturiano, que se fue de Málaga siendo un chaval de 20 años ha vuelto, tal vez, este sea ‘the last dance’ antes de retirarse.