Las ciudades de Cástulo y Tárraco, predecesoras de Linares y Tarragona, se encontraron en flancos opuestos durante la Segunda Guerra Púnica. El enclave jienense, íbero, llegó a ser testigo de uno de los enfrentamientos directos entre los imperios dirigidos desde Cartago —aliada de Cástulo— y Roma. En esa ocasión, fueron las tropas de Aníbal las que salieron victoriosas. El caprichoso destino quiso repetirse milenios después con una pelota en medio. El Linares Deportivo se impuso por 2 a 0 al Gimnàstic de Tarragona y se convirtió en el primer equipo capaz de imponerse a los granas después de nueve jornadas de imbatibilidad.
Linares Deportivo | 2 | 0 | Gimnàstic de Tarragona |
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Recuerdos de la Segunda Guerra Púnica
En el año 218 a.C., el general romano Cneo Escipión desembarcó en la antigua ciudad griega de Emporion. Las tropas cartaginesas habían emprendido una expedición militar en la península Ibérica para obtener riquezas y paliar sus debilitadas finanzas. El río Ebro —entonces, Íber— actuaba como frontera entre los territorios dominados por Cartago y Roma. Sin embargo, en tierras conquistadas por Aníbal se encontraba Arse, la actual Sagunto, aliada del Imperio. Ante esta afrenta, el Senado tomó una decisión: iniciar dos golpes simultáneos en África y en Hispania. Acababa de empezar la Segunda Guerra Púnica.
Tras amerizar en el norte de la actual Cataluña, Cneo Escipión se dirigió al sur para enfrentarse a las tropas cartaginesas y, ese mismo año, estableció el enclave de Tárraco, actual Tarragona, que se convertiría en una de las capitales de la España romana. En la otra punta de la península se encontraba Cástulo. La ‘ciudad de las minas’ estaba bajo dominio íbero, pero decidió aliarse con Cartago en la guerra. Siglos más tarde, de los restos de la civilización nació Linares.
Josema asesta el primer golpe
Dos milenios pasaron desde que culminó la Segunda Guerra Púnica. Ocurrió una tercera y ya no existen ni el imperio romano ni el estado púnico. Sin embargo, otro capítulo de su particular enemistad se estaba escribiendo en Linarejos. Linares Deportivo y Nàstic de Tarragona eran los herederos de los guerreros de antaño e, igual que en el pasado, ambos conjuntos desplegaron tácticas basadas en la colocación y la formación. Innumerables centros volaron desde las bandas, pero las defensas, bien replegadas, se encargaban de sacarlos todos. Tan solo una lanza parecía ser capaz de hacer daño: la de Cristian Carracedo. El extremo fue el primero en atizar los escudos granas tras fintar ante Bonilla, pero demasiado centrada fue su embestida. Suyo también fue el pase para que Adán Gurdiel encarara por el flanco derecho.
El Nàstic parecía amedrentado. No esperaba encontrarse con una resistencia íbera de este calibre. De hecho, 40 minutos tuvieron que pasar de acecho jienense hasta que Robert Simón se plantó ante Razak tras una cabalgada de Pablo Fernández. Pero ya era tarde. A la media hora del inicio de la contienda, Trilles hizo una falta a la izquierda del área que le costó la amarilla. Ale Meléndez envió una pelota al punto de penalti por correo aéreo, Josema se levantó y remató de cabeza. Nada pudo hacer Manu García. El Linares Deportivo veía su esfuerzo recompensado con el 1 a 0.
Reacción grana
El general grana Raül Agné sabía que necesitaba cambiar su dibujo e introdujo a dos nuevos guerrilleros nada más volver de la tregua, Jannick y Dani Romera. De las botas de ellos surgieron las primeras aproximaciones, siendo la más destacada un centro del ecuatoguineano que por cuestión de milímetros no pudo rematar Pablo Fernández. En cuestión de segundos, los herederos del imperio romano enorgullecieron más a sus antecesores que en los 45 minutos anteriores.
Sin embargo, Alberto González encarnó a Aníbal. Magnánimo estratega, contaba con Cristian Carracedo como su extensión en el campo de batalla. Desde el flanco derecho, lanzó un globo. La defensa quedó boquiabierta contemplando su trayectoria. Y cuando aterrizó en el segundo palo, Kako no tenía oposición alguna. El disparo de primeras del pivote se estrelló contra el poste.
Sentencia al Senado
El Nàstic es un equipo masoquista. Cuando más le golpean es cuando más motivado se siente. Después de que Kako perdonara el 2 a 0, los tarraconenses reaccionaron y decidieron llevar la batuta, arrebatándosela de las manos al conjunto azulillo. Razak voló para sacar de la escuadra un zapatazo de Romera. A continuación, Quintanilla, Becerra y Nil Jiménez se montaron en la misma aerolínea para rematar de cabeza un trío de centros. Los dos primeros testarazos salieron altos y el tercero lo atrapó el guardameta minero. Ante el éxtasis grana, Robert Simón protagonizó la mala noticia de la jornada al tener que retirarse del campo doliéndose del cuádriceps.
Con los granas agotados, Nando Copete certificó la victoria local al aprovechar un error en la marca de Quintanilla. El segundo tanto del partido puso fin a una racha de nueve jornadas consecutivas del Nàstic sin perder, mientras que amplió la propia del Linares a cinco. De esta manera, los pupilos de Raül Agné se irán a cenar novenos, con 44 puntos. Por su parte, los mineros ascienden hasta la duodécima posición, con 39 puntos.
Ficha técnica | |
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Linares Deportivo: Razak; Adán Gurdiel (Lolo Guerrero, min. 80), Admonio, Josema, Álvaro Barbosa; Kako, Meléndez, Fran Lara (Rubén Sanchidrián, min. 73); Carracedo (Nando Copete, min. 73), Ion Etxaniz (Javi García, min. 84) y Fran Carnicer (Hugo Díaz, min. 73). | |
Gimnàstic de Tarragona: Manu García; Pol Domingo, Quintanilla, Marc Trilles, Joan Oriol; Robert Simón (Édgar Hernández, min. 78), Elías (Jannick, min. 46), Pedro del Campo, Bonilla (Nil Jiménez, min. 62); Pablo Fernández (Becerra, min. 62) y Fran Carbia (Dani Romera, min. 46). | |
Goles: 1-0, min. 30: Josema. 2-0, min. 88: Nando Copete | |
Árbitro: Jorge Tárraga Lajara (Comité valenciano). Amonestó a Kako (min. 78) y Admonio (min. 79) por parte del Linares y a Marc Trilles (min. 29) por el Nàstic. | |
Incidencias: Partido correspondiente a la trigésima jornada de Primera RFEF Footters, disputado en el Estadio de Linarejos, Linares. |