La permanencia pasa por Ganzábal

Se viene una auténtica casi final por la salvación. Para el Unión Popular de Langreo es una oportunidad de coger mucho aire en la tabla y encadenar dos victorias consecutivas con la llegada al banquillo de Roberto Robles hace apenas semana y media. Para el cuadro salmantino eso se hace obligatorio. Vienen de ganar la semana pasada goleando y convenciendo y necesitan, al situarse a cuatro puntos de la permanencia, prolongar esa racha de victorias. No será fácil en un campo donde este curso solo dos equipos han ganado (Pontevedra y Cristo Atlético) como visitante. Pero la necesidad aprieta a lograrlo.

El encuentro será dirigido por el colegiado gallego de 32 años. Tras dos campañas en la extinta Segunda División ‘B’, se estrena este curso en Segunda RFEF, donde ha sido un habitual en encuentros disputados en el Principado. No en vano de los 11 partidos dirigidos (con un balance de 5 victorias locales, 2 empates y 4 victorias visitantes) este curso por él, 6 han sido en territorio astur y este domingo será el séptimo. Será la cuarta vez que dirija al Unión, con un balance previo de una victoria y dos derrotas. Para el cuadro charro se la segunda ocasión en la que se crucen, siendo el primer y único precedente una derrota hace dos campañas por 0-3 ante la SD Amorebieta.

Los dos equipos llegan cargados de moral tras resultados muy positivos

El técnico langreano, Roberto Robles, quiso incidir en que la clasificación puede dar a engaños, pues el rival es un equipo de mucho nivel. «Vamos a jugar contra un equipo muy importante, diseñado para estar en otra pelea. Tienen varios puntos fuertes con jugadores que al espacio van muy bien y tendremos que estar muy atentos para que no nos hagan daño. El grupo está convencido del planteamiento que tenemos para lograr la victoria», dijo el entrenador langreano que vivirá su debut en el banquillo local del Nuevo Ganzábal tras hacerlo la semana pasada con victoria en La Cruz. El técnico gijonés tendrá la única baja segura de Gonzalo, que sigue en el dique seco.

En el bando charro la ilusión está plenamente renovada tras ganar la semana pasada por goleada a un rival directo como el Arosa (que además ha cambiado de técnico esta semana). La gran primera mitad frente al conjunto gallego fue de lo mejor de todo el curso en el equipo y por ello se espera que a pesar de jugar como visitante y el cambio de superficie -algo que a María Hernández siempre le ha motivado a cambiar algunos matices en juego, táctica u once- se espera que el once sea el mismo para intentar prolongar la racha en Langreo y seguir aspirando a la salvación.