Alex Sola coloca al Sanse a un paso de obrar el milagro

Partido sufrido hasta el final entre dos equipos de la zona baja de la clasificación, con un equipo más vivo que otro en la categoría de plata del fútbol español. El Fuenlabrada, ya con el descenso asegurado, no quiso ceder un palmo de orgullo y le puso las cosas difíciles a la Real Sociedad B, que se jugaba seguir luchando por la salvación y logró sumar nuevamente tres puntos gracias a una victoria crucial y que se llevó en el descuento por1-2.

El plan de Sandoval fue claro, desde el comienzo del choque presionó muy arriba para dificultar en la salida del balón de la defensa donostiarra, forzando muchos fallos a la hora de despejar en largo y mandar el balón al campo contrario. Los de Xabi Alonso no se aminoró y supo que, como los demás encuentros, iba a ser complicado.

Tuvo la primera clara Lobete al fallar un disparo que se fue lamiendo la cepa del poste. Minutos después, ‘los potrillos’ se animaron al ataque y Robert Navarro enganchó un pase de Turrientes que se desvió ligeramente de la portería. No fue una primera parte marcada por el dominio de un equipo en concreto, sino que fue abierto y con ocasiones y espectáculo para los aficionados.

Sobre el 18’ el Sanse pudo haberse adelantado en el marcador, pero un fuera de juego de Alkain por posición adelantada hizo que no se moviese el resultado. Esto fue algo que le dio fuerza al Fuenlabrada y reaccionó ante las acometidas de los rivales.

El mayor quebradero de cabeza fue para los vascos Javier Ontíveros, muy activo por la banda izquierda. Las mejores ocasiones del Fuenlabrada, junto con Pedro León, llegaron por las bandas del Fuenlabrada y no pararon de hacer peligro cada vez que los locales tuvieron la iniciativa con el balón.

A pesar de que fuese un encuentro con ocasiones de ambos equipos, poca puntería tuvo para poder abrir el marcador y mandar en el resultado. No fue hasta el filo de la primera mitad cuando se vio cómo la fortuna le sonrió a los fuenlabreños. Entorno al minuto 44, Bouldini recibió un centro que no dudó en rematar con toda la fe para poder batir a Zubiaurre y poner al Fuenlabrada por encima de su rival, que tenía que remontar en 45 minutos para mantener aún opciones.

Y, con ese tanto psicológico que adelantó a los azulones al descanso, finalizó de esa manera los primeros 45 minutos.

Otra remontada

De la misma manera que terminó la primera mitad, empezó la segunda, con el Fuenlabrada llevando el partido a su terreno, con más acercamientos al área de Zubiaurre. El Sanse quiso empatar haciéndolo cómo ellos saben, con un estilo de juego muy propio y que le ha llevado hasta la segunda división, pero le iba a costar mucho tener un poco de calma y serenidad para empezar a construir su juego.

Los locales llegaban con facilidad al área rival y en cuestión de tres minutos acumuló tres ocasiones, signo de en qué dirección iba el encuentro. Primero llegó Ontíveros, que mandó al balón a córner y, en la siguiente jugada Tachi quiso sorprender y remató desviado. Terminó David Amigo con un chut que salió muy desviado.

Fue justo lo que necesito el Sanse para entrar en el partido. Minutos después, en una jugada a balón parado, Alkain remató un balón tras una jugada a balón parado colgando el balón Ander Martín y empatando para que a los donostiarras se les subió la moral.

Con aún 15 minutos por disputar, la Real B se echó al ataque y acumuló hombre en campo rival, incomodando defensivamente, pero sin llegar a terminar las jugadas que, muchas de ellas, se cortaron en los minutos finales.

La esperanza de los txurriurdines llegó cuando en el minuto 87 Bouldini pasó a convertirse de héroe a villano cuando en dos minutos recibió dos amarillas que le llevaron a la expulsión y dejó para los últimos diez minutos al Fuenlabrada con solo diez hombres en el campo.

Cerca estuvieron de llevarse el partido en el añadido cuando Jonathan Gómez remató un balón al segundo palo que, fue anulando por posición adelantada de Alex Sola. Las esperanzas se acababan para el equipo de Xabi Alonso, que vivió en los últimos siete minutos de descuento en el campo y acabó sucediendo lo que vio venir.

Un misil de Alex Sola, que se animó a probar fortuna desde fuera del área, mandó el balón a la escuadra imposible para Altube, que tocó, pero no lo suficiente como para despejar el cuero. Un gol que desató la euforia realista a tres minutos de concluir un partido que se puso cuesta arriba desde el final de la primera mitad.

El árbitro finalmente señaló el final del partido y la Real B se acabó llevando una victoria importantísima para poder seguir soñando con la permanencia. Una victoria que se tradujo en remontada tras haber encajado gol en la primera mitad. Los pupilos de Xabi Alonso, con este resultado, suma la tercera victoria consecutiva y, a expensas de lo que hagan Amorebieta y Málaga, está a un punto de salir del descenso.