Whalley bien vale un punto

Llegaba el CD Lugo a Can Misses con el objetivo de no demorar la permanencia matemática más allá de esta jornada. Para ello le tocaba vencer en casa de una UD Ibiza que hizo eso mismo la semana pasada en su visita a Gijón. No logró el conjunto albivermello ese objetivo, pero suma un punto que sabe muy bien ya que el partido fue de dominio casi total celeste, que tuvo juego y ocasiones para poder dar una alegría a su afición, pero que finalmente no pudo hacer inútil un autogol de Manu Molina.

El partido comenzó de la mejor forma para los intereses lucenses. Antes de cumplirse los seis minutos, un centro desde izquierda, aparentemente fácil para zaga o portero, lo remata Manu Molina contra su propia portería en un intento fallido de despeje. Un paso más cerca hacia su permanencia, pero el Ibiza, aunque fuese solo por agradar a su afición, no se lo iba a poner sencillo. Los de Paco Jémez se hicieron con el monopolio y el dominio del partido tras el gol, haciendo que el Lugo se encerrase en su campo. Pero les costaba crear peligro ante la meta de Whalley, siendo solo Góldar a balón parado quien inquietó en este primer tramo.

Era con espacios el Lugo quien buscaba más las debilidades ibicencas. Una acción individual de Ricard Sánchez la finalizó con un disparo que atrapó bien Álex Domínguez. Sabía Rubén Albés que no podía dejar al Ibiza tener esas posesiones largas moviendo el balón y aumentó la intensidad en los últimos veinte minutos. Esto hizo crecer al Lugo, que si bien no lograba crear ocasiones, si mantenía la acción del partido lejos de la portería de Whalley. Realizaron una primera parte los lucenses de lo más sobria para no ver a su portero tener que intervenir para llegar al descanso por delante.

Mucho tenía que cambiar en el bando celeste en el segundo tiempo si quería sacar algún rédito del partido y Jémez movió tres fichas al descanso. No tardó ni un minuto en tener su primera ocasión con un potente remate del ex albivermello Cristian Herrera que atajó Whalley. Fue el aviso del gol que llegaría en el minuto 50 al rematar Ekain un buen centro desde la izquierda. Salida fulgurante de un Ibiza que veía como las teclas tocadas por Paco Jémez funcionaban a la perfección.

El empate no hizo más que reforzar al Ibiza, que vio como Chris Ramos le perdonaba la vida solo un minuto después en un mal despeje de Álex Domínguez que el gaditano no supo redirigir entre palos. Ekain tuvo el doblete a continuación en un balón suelto tras un córner, pero remató mal el vasco. Y es que era el Ibiza quien, ahora ya no solo dominaba el tempo del partido, sino también tenía ocasiones. Davo y Javi Lara tuvieron en el 60′ y 63′ dos nuevas opciones, pero Whalley apareció primero y el palo después para evitar el 2-1.

Necesitaba el Lugo piernas y frenar el ímpetu ibicenco. Lo primero lo hizo con la entrada de Señé y Sebas y lo segundo gracias a una acción fortuita que requirió de que tanto Cristian Herrera como Alberto tuviesen que ser atendidos primero y más tarde fuesen Ekain y Chris Ramos. Esos parones le vinieron bien para frenar el ritmo. Sin embargo, el Ibiza siguió empujando y al minuto 83, Whalley volvió a ser el salvador albivermello para evitar con el pie al más puro estilo portero de balonmano un gol en propia puerta de Alberto Rodríguez tras una buena acción de Miki Villar.

En los últimos minutos nada cambió. El Ibiza lo siguió buscando y, otra vez Whalley, salvó a su equipo con una mano a la escuadra para evitar el octavo gol de la temporada de David Góldar. También Appin tuvo la última ya en el añadido, pero el marcador no se movería y el Lugo, si bien no cierra su permanencia, sale de Can Misses con un punto más que le acerca a la misma. La próxima jornada llevará a los ibicencos a visitar Anduva, donde el Mirandés buscará certificar su permanencia matemática. Por su parte, el CD Lugo recibirá al ya descendido Fuenlabrada en el Anxo Carro el próximo sábado con ese mismo objetivo.