El Badajoz juega una «final» ante un Celta B, que puede asegurar el playoff
CD Badajoz - Celta B | Domingo, a las 12:00h | Trigésimo sexta jornada de la Primera RFEF | Estadio Nuevo Vivero, Badajoz | Árbitro: Tárraga Lajara | Un Badajoz al que sólo le vale ganar, se enfrenta a un Celta B intratable, que puede certificar su clasificación para los playoff de ascenso.
La mañana que Johnny Hooker y Henry Gondorff planean participar en la timba de póquer que se celebra en el tren con destino a New Jersey, todos los suspicaces espectadores somos conscientes que entre tramposos anda el juego. Que unos lo son más que otros, también lo tenemos meridianamente claro. Y que el organizador de esa timba semanal Doyle Lonnegan, es el más malo, malísimo, también lo acepta todo ser pensante que haya visto esta espectacular secuencia. Qué, por cierto, ya forma parte de la historia del celuloide.
Y es que en el mundo del hampa, en el de la trampa y el engaño, ¿quién está libre de pecado? El mafioso Lonnegan, en este film irrepetible, es el auténtico culpable de todas las tropelías que suceden en la ciudad. Pero los dos amigos, timadores de poca monta, que quieren estafarle, tampoco son hermanitas de la caridad precisamente. Aunque, claro, el espectador necesita desde el minuto uno posicionarse y buscar a sus «héroes». Al fin y al cabo que es una peli sin los «buenos». Y a los 15 minutos de metraje ya todo el mundo se ha posicionado al lado de Johnny y Henry.
Y algo parecido está sucediendo en el último año, en la parte «noble» que dirige o mal dirige o no dirige o yo que sé, los designios del centenario club de la capital del Guadiana. Pues igual que en nuestra peli de los timadores, en el CD Badajoz también entre tramposos anda el juego. Sólo que aquí, en el mundo real, y no en uno paralelo que diría un amigo de tertulia, no hay buenos y malos como en las pelis. Aquí tramposo es el que se fue, o se lo llevaron, pero que nunca se fue. Y tramposos son los que llegaron o no llegaron, los que compraron o no compraron. Cualquiera que los conozca a estas alturas, ya no hace distingos entre el que vendió, pero no vendío y los que compraron, pero no compraron.
Y en medio de esta auténtica locura en la que vive constantemente el equipo pacense, sus jugadores tienen que jugar tres finales seguidas. Jugarlas y ganarlas o, al menos, ganar dos y empatar la de fuera. Si quieren tocar el cielo y meterse en los ansiados playoff. Vamos casi nada lo que tiene que hacer esta enorme plantilla en apenas dos semanas. Como soplo de aire fresco, en medio de esta situación grotesta y kafkiana, esta misma semana abonados del club creaban la Plataforma Sentimiento Blanquinegro. Quizás sea la única solución para salvar a este histórico club. Qué esta banda de tramposos, que se esconden en el timo y el engaño, se den cuenta de la unión que existe en la gran masa social que rodea al club.
En lo deportivo el conjunto que entrena el cartaginés Isaac Jové, llega en cuadro a este importantísimo partido. Por si las interferencias de los problemas institucionales fueses pocos, se añaden unas cuantas bajas en la convocatoria. Siguen lesionados Dani Fernández y Otegui. Y, además, se pierden el partido por acumulación de tarjetas y un partido de sanción, Clemente y Adri Cuevas. Y por una roja directa, totalmente injusta, el centrocampista Zelu. Su mejor jugador, sin duda, en el último partido frente al Valladolid Promesas. Encuentro este, donde se vio a un conjunto por debajo del nivel que había ofrecido en las últimas jornadas. Lo que le llevó a caer derrotado en los Anexos José Zorrilla. Por lo que mañana su entrenador deberá hacer un auténtico encaje de bolillos para conformar el once. Y tirar incluso de jugadores de la cantera para completar la convocatoria. Quizás sea el momento de jugadores como Adilson o Aquino. A los que se les esperó toda la temporada y ahora tienen su partido y su momento para demostrar la enorme calidad que ambos atesoran.
Y en el otro lado mañana visitará el Nuevo Vivero, el Celta B. Sin duda el mejor filial de este grupo de Primera RFEF y uno de los mejores equipos de esta categoría. Un equipo que viene lanzado y dispuesto a certificar su clasificación para los playoff de ascenso. Dónde ocupan una cuarta posición que quieren consolidar. Al contrario que su rival extremeño, que sólo ha durado una jornada en los puestos nobles de la tabla. Los chicos que entrena el bueno de Onésimo Sánchez, llevan sin perder desde el 9 de abril ante el Sanse. Su única derrota en los últimos siete partidos. Esto dice a las claras el buen hacer del filial celtarra. Y, además, en la última jornada disputada en la ciudad Olívica, fueron capaces de endosarle un 5 a 3 a la Cultural Leonesa.
Bien es cierto que en ese encuentro pudimos observar las muchas virtudes que atesora el once de A Canteira Celeste. Pero también pudimos ver sus defectos. Y todo ello concentrado en tan sólo 90 minutos. Así de intenso es este equipo. Como lo suelen ser todos filiales. El Celta B derrocha calidad. Te presiona tan arriba y con tanta intensidad, algunas veces desde el mismo área rival, que no te da tregua alguna. Es un equipo al que no le puedes dejar espacios. Pues con la velocidad de jugadores como Holsgrove, Fabricio o su goleador Miguel Rodríguez, te matan en un suspiro. Además definen a una velocidad y con una calidad impropia de esta categoría. Aunque también hay que apuntar que tienen lagunas propias de su edad y también de esta categoría. Su defensa sufre mucho por arriba, especialmente en los centros laterales. Y tienen pérdidas no forzadas en la salida de balón. Lo que lo hace un conjunto capaz de lo mejor, pero también de lo peor.
En cualquier caso, ambos conjuntos, extremeño y gallego, con tantas cosas en común en sendas comunidades -cuantos extremeños y gallegos toda la vida en la diáspora-, mañana a las 12:00h., volverán a coincidir en algo. Que ambas plantillas, ambos cuerpos técnicos, ambas aficiones serán de nuevo de VERDAD, sin intentar engañar a nadie. Y lo darán todo por sus colores. Unos blanquinegros y otros celestes. Y es que los tramposos siempre están lejos del césped. Los que engañan como aquellos dos timadores de poca monta, protagonizados magistralmente por Robert Redford y Paul Newman. En esa obra maestra que lleva por título «El golpe» (The Sting). Dirigida, como si de una obra de teatro se tratase, por George Roy Hill. Aunque ya saben que los buenos sólo existen en las pelis. En el mundo real, en esta dimensión, tramposo es el que vendió, pero no vendió. Y tramposos son los que compraron, pero no compraron. En el cine puedes ganar con una «Escalera de color». Pero en la vida tampoco valió esa mano. Todo humo.
Buen artículo, pero una corrección: Nunca digas el equipo «celtarra». Eso es un insulto al equipo «celtiña». Los Celtarras (grupo ultra del Celta) ha sido disuelto hace años, afortunadamente. El Celta nunca ha sido «celtarra». Les puedes decir: «olivico», «celeste» o simplemente «celtiña».