El Valladolid se trae el botín de la isla bonita

Llegaba el Valladolid a Ibiza con los cinco sentidos puestos en sacar los tres puntos pero con un ojo en Ipurua pendiente de que el Tenerife pudiera sacar algo positivo. Esa combinación de resultados pondría a los pucelanos en ascenso directo a falta de una jornada. Por su parte los locales afrontaban el encuentro sin nada en juego salvados ya hace varias jornadas.

Y pronto se pusieron los de Pucheta por delante gracias una vez más a Weisman que marcaba el primero a los dos minutos. En un gran comienzo los visitantes asediaban la meta local y gozaban de buenas ocasiones para lograr el segundo. Plata muy enchufado en estos minutos era un puñal por su banda. Y Villa en la suya no le iba a la zaga con Iván Sánchez dirigiendo en ataque.

Coincidiendo con el gol del Éibar empezó a llegar el Ibiza a la meta de Masip. Herrera dispuso de la mejor ocasión local pero no logró definir ante Masip. Se empezaba a parecer el encuentro demasiado al del domingo ante la Ponferradina.

Sin embargo la segunda amarilla de Molina devolvía la tranquilidad a los pucelanos que con uno más volvieron a recuperar el control del juego.

Se alcanzaba el descanso con un Valladolid que tras un fulgurante inicio se dedicó a contemporizar lo que le provocó algún susto.

Arrancaba la segunda parte bajo los mismos parámetros. El Valladolid seguía sesteando peligrosamente ya que el Ibiza a pesar de contar con uno menos no bajaba los brazos. Así Miki Villar estuvo a punto de empatar pero con todo a favor no acertó a batir a Masip. Pero el Valladolid seguía a lo suyo mucho toque y control sin forzar demasiado el ritmo. Mas pendientes los visitantes de no perder balones que generar peligro conscientes de que su mayor calidad daría su fruto. Y así a base de madurar la jugada llegaría el segundo de Weisman tras una buena conexión con Toni Villa. Parecía que ahora sí los visitantes sentenciaban con media hora todavía por delante.

Pero nada más lejos de la realidad porque enseguida llegaría el gol del Ibiza por medio de Herrera que fusilaba a Masip en una contra de libro tras el error de Nacho.

El gol dió alas  los locales y metieron el miedo en el cuerpo de los visitantes. Las imprecisiones pucelanas hacían temblar a su defensa. Mientras el Éibar sentenciaba en su casa y el Almería se complicaba la vida con el Alcorcón los de Pacheta pedían la hora ante un correoso Ibiza que no bajó los brazos en ningún momento pero no lograría el premio del empate.

Al final el Valladolid sumó los tres puntos y queda todo abierto para  una última jornada con todo en el aire aunque son ellos los que a priori más difícil lo tienen pero…