El Real Madrid logra la 14ª
Un tanto de Vinicius y una actuación estratosférica de Courtois llevan la Champions a Madrid
La 14ª es una realidad. Venció el Madrid al Liverpool en la final de la Champions con un gol de Vinicius y una actuación para la historia de Thibaut Courtois. El inicio de partido fue un abuso del Liverpool, pero el Madrid supo aguantar cuando tocaba y aprovechó una de las pocas ocasiones que tuvo para anotar el gol que ha dado la 14ª a las vitrinas del Santiago Bernabéu. Courtois se encargó de detener todo lo que pasaba por el área y Vinicius de certificar el título.
El Madrid aguanta la tormenta ‘red’
Con 40 minutos de retraso, y un Thiago que en el calentamiento parecía que no podría salir de inicio, arrancó la final de la Champions. Los primeros minutos del Liverpool fueron una tormenta eléctrica sobre la defensa madridista. Mo Salah y Sadio Mané habían salido endiablados y pusieron en jaque la portería madridista. El egipcio remató de tacón un gran centro de Alexander-Arnold y, escasos minutos después, remató desde la frontal otro balón, ambos detenidos por Courtois. Por si no fuera suficiente, el belga detuvo un lanzamiento de Mané que rebotó en el palo evitando el primer gol del choque. El marcador mostraba el minuto 20 de partido.
Polémica antes del descanso
La tormenta del Liverpool cesó, el cuadro inglés siguió dominando, pero con menos ahínco sobre la portería rival que al inicio del choque. Pese a esta superioridad, la primera mitad acabó con polémica tras un gol anulado a Benzema. En la única ocasión del Madrid, el delantero francés anotaría tras un barullo dentro del área. No obstante, el colegiado señaló posición antirreglamentaria. El balón lo toca Valverde y, tras rebotar en Konaté y Fabinho, le cae a Benzema, que anota sin oposición. El colegiado, tras la revisión del VAR, corroboró el fuera de juego y acabó anulando el tanto.
La estocada de Vinicius
En la segunda mitad, el Real Madrid salió con mucha más iniciativa, más activo en el centro del campo y con ganas de buscar el error del Liverpool. Y cerca de la hora de juego llegaría la locura blanca en Saint-Denis. Fede Valverde cogió el balón y arrancó la moto por la banda derecha. El uruguayo llegó a la esquina del área y lanzó, solo él sabe si intentó el gol o un pase. El balón le cayó a Vinicius que, sin oposición, empujó a placer para adelantar al Real Madrid. Los de Ancelotti daban el primer golpe de efecto.
Pese al gol del brasileño, la final tenía nombre y apellidos: Thibaut Courtois. El belga, tras el gol de Vinicius, se encargó de detener dos lanzamientos más de Salah, uno de fuera del área y otro de un toque sutil en el área pequeña. Parecía imposible superar al muro belga. Para eso, Klopp sacó al campo jugadores frescos como Firmino, Keita o Jota, pero lo de Courtois no se podía explicar con palabras. En el 82, el belga salvó con el bíceps un disparo a bocajarro de Salah. El partido se rompía.
Llegó la 14ª
El partido no dio para más y el Madrid se proclama campeón de la Champions League por decimocuarta vez. El partido del Madrid en defensa fue sublime y supo aprovechar una de las pocas ocasiones de las que dispuso. Courtois se vistió de héroe y paró todo lo que le llegaba. El Madrid logra la Champions con una de las narrativas más épicas de la historia.