Sufrida pero merecida victoria del Villarreal en su bálsamo europeo

Jornada intersemanal de Conference League en la que el Villarreal pretendía confirmar el liderato de su grupo y de paso, olvidar la derrota liguera contra el Betis.

El partido no fue un paseo de rosas como se podía pensar en las horas previas, pues el equipo israelí salió con la convicción de dejar los 3 puntos en casa. Primero una intensa presión sorprendió a los hombres de Unai Emery, que tuvo que replegarse para buscar su oportunidad ante el afán de su rival por tener la posesión.

En el ecuador de la primera parte y probablemente como consecuencia del desgaste de los israelíes, un desajuste en su defensa permitió a Morlanes filtrarle un balón a Álex Baena que haciendo gala de su extraordinaria velocidad lograría un penalti provocado por el portero Glazer. Desde los 11 metros no fallaría Morales para su tercer gol en la competición.

Mientras, en la portería groguet, el canterano Jorgensen buscaba hacerse grande tras los 3 goles que recibió en la primera jornada, y lo hizo repeliendo los lejanos disparos de los atacantes del Beer Sheva.

Ya en la segunda mitad los israelís tratarían de sobreponerse al marcador adverso, y para ello gozaron de una primera falta en la frontal que se marchó por arriba del travesaño.

Tras ella, el Villarreal entró en el tramo más cómodo del partido, protagonizado por posesiones con el criterio de buscar un desmarque de los delanteros. De esta forma Yeremi Pino pudo disparar dos veces a puerta, aunque sin inquietar en exceso al portero rival.

También gozó de un cabezazo de Mandi que sin saltar casi la colocó en la escuadra. Quien si que la puso ahí fue el delantero del Beer Sheva, Hatuel, y todo con un precioso golpeo de primeras y dirigido al palo corto de la portería defendida por el submarino amarillo.

No obstante, la alegría en Jacob Turner no duró más que 4 minutos, que fue el tiempo que tardó Baena en volver a poner al Villarreal por delante. Sería gracias a un preciso envío al área de Yeremi Pino, quien cuajó un partidazo.

Este tanto terminó de sentenciar la esperanza de los locales, y casi lo confirmó Jackson en el electrónico con un pase, de nuevo de Álex Baena, que desaprovechó pese a rematar a portería vacía.

Los últimos minutos los pudo contemporizar bien el Villarreal gracias a la entrada durante la segunda mitad del centro del campo titular: Parejo y Capoue. Pudieron volver a sentenciar, esta vez por un mano a mano de Danjuma, pero sin el éxito que la acompañó al neerlandés la temporada pasada. 

Ya con el Hapoel volcado al ataque, la última jugada se traduciría en una contra del Villarreal que acabaría con un penalti para Danjuma que de nuevo vio como la sombra de su lesión es más larga de lo que espetaba, pues lo envió por encima de la portería.

Finalmente la victoria asienta al Villarreal en la primera plaza y ya sólo queda pensar en el duelo contra el Sevilla del fin de semana.