La ley del ex hace de las suyas en El Sardinero

El calendario ha dicho que el Real Zaragoza visite los Campos de Sport de El Sardinero un 12 de octubre, Día del Pilar. Un duelo por la zona baja, separados por dos puntos y que podría suponer la salida del descenso del conjunto cántabro o, por el contrario, que los aragoneses respirasen un poco y alejarse de esos puestos bajos.

Primeros compases de partid y el balón es de color maño. Poca presión inicial del equipo de Guillermo Fernández que espera más atrás. Insistía más el Zaragoza que salió con las ideas más claras en los primeros minutos. Sin embargo, los primeros avisos los dio el conjunto cántabro. Se metió por dentro de la defensa íñigo Vicente e intentó una vaselina por encima del portero del Zaragoza. A renglón seguido, buen remate dentro del área de Sainz-Maza de cabeza que tuvo el primero pero se encontró con una gran parada de Cristian.

Con el paso de los minutos se trababa el partido con continuas interrupciones. Los maños querían la pelota pero no llegaban con claridad al área racinguista. Mucha posesión, poca profundidad. Faltaban ocasiones en El Sardinero. De nuevo el que probaría a Cristian sería el Racing. Vaya remate de Mboula y vaya parada espectacular del portero del Zaragoza. Mantenía la posesión el equipo de Carcedo, el Racing estancado en la zona de medios.

Avanzaba el cronómetro sin cambios y moría el primer tiempo con el 0-0 en el luminoso. Antes del descanso, se quedaba el Zaragoza con uno menos. Giuliano Simeone veía la segunda amarilla y al filo del descanso. Los maños jugarían con uno menos para toda la segunda parte.

Empezó fuerte el segundo tiempo el conjunto local buscando el gol pero se encontraba siempre con Cristian. El portero y su defensa eran un muro que, con uno menos, intentaba aguantar la insistencia local. Se encaraba el tramo final de partido cuando llegó el gol. Jorge Pombo, ex jugador del Zaragoza, puso el primero del partido para el Racing tras un cabezazo en el primer palo espectacular a un saque de esquina perfecto de Íñigo Vicente. Lo buscaba el equipo de Guillermo Fernández y lo consigue.