El inicio de temporada del CD Leganés era una auténtica pesadilla de las que provocan sudores fríos. Aunque Imanol Idiákez estaba en la cuerda floja, el vasco aguantó el envite. Mutó, porque decir cambiar se queda corto, varias cosas y el equipo empezó a responder en parte frente al Albacete, aunque perdiese. En Cartagena confirmó esa mejoría (con fortuna, eso también) y frente al Málaga logró una segunda victoria seguida. Ahora busca lo más difícil todavía, una tercera frente al potente Levante el domingo a las 14:00 horas.
La misión es de mucha enjundia. No ya solo por ser el rival una de las mejores, sino la mejor, plantilla de la categoría como es el Levante. También porque lograr tres victorias seguidas no es algo que se vea de forma común por Butarque. De hecho la última vez que lo logró hay que remontarse más de 600 días hacia atrás. Fue el 14 de febrero de 2021 cuando, ya con Gaizka Garitano en el banquillo tras el cese de Pep Lluis Martí, el Leganés encadenó un total de cinco victorias seguidas. Las tres primeras, el hito que los pepineros buscan repetir el domingo, fueron hace 609 días. O lo que es lo mismo, hace un año y ocho meses.