Un Real Madrid con mucha pegada golea al Elche a pesar de las intervenciones del VAR

El Elche C.F. recibía en la décima jornada de la Liga Santander ni más ni menos que al líder de la competición liguera. Los de Jorge Almirón buscaban rascar algo positivo en su estadio frente a un rival al que tan solo había impedido llevarse los tres puntos el Osasuna. El Real Madrid, por su parte, visitaba al farolillo rojo de la clasificación después de su contundente victoria frente al Barça en la anterior jornada de la competición liguera, para visitar un Martínez Valero en el que buscaría mantener la renta frente al conjunto catalán.

El Madrid firmó una primera mitad antológica, pero la suerte no acompañó

Consciente de la importancia de llevarse hoy los tres puntos, ambos técnicos salieron con un equipo prácticamente de gala. No obstante, como era de esperar, los de Carlo Ancelotti comenzaron llevando el peso del encuentro. Un dominio que no tardó en traducirse en un claro peligro. De hecho, a los cinco minutos de encuentro, entre Modric, Rodrygo y Vinícius tejieron una jugada de fantasía, que terminó con un pase de la muerte del carioca para Karim Benzema, que la empujo a placer al fondo de las mallas. Sin embargo, el VAR determinó que el flamante Balón de Oro se encontraba en fuera de juego, por lo que el gol no subió al marcador.

Se intentaron sacudir los locales del dominio inicial del conjunto blanco, vestido de negro para la ocasión, pero la superioridad merengue era muy evidente, marcada por un altísimo ritmo de juego que los ilicitanos no podían igualar. Continuaba el vendaval visitante, y en una vertiginosa jugada de ataque, Benzema estuvo a punto de volver a marcar a placer, aunque Bigas la sacó bajo palos. Sin embargo, en la segunda jugada, la pelota le cayó a Fede Valverde en la frontal, que con un zurdazo, la puso lejos del alcance de Badía, haciendo subir el primer tanto al marcador.

Trataban los locales de igualar un poco las fuerzas, pero el dominio de los de Carletto, sobre todo debido gracias a una enorme superioridad en la medular, acompañado por una altísima presión tras pérdida, hacía que los de Almirón se dedicasen a perseguir sombras durante los primeros 25 minutos del encuentro. Y a partir de entonces, la cosa tampoco mejoró mucho.

Y es que el Madrid salió al terreno de juego con la equipación de los Globetrotters. Y es que, nuevamente, los de Ancelotti hilaron una jugada coral que fascinó a todos. David Alaba realizó dos triangulaciones con Benzema y con Valverde, para plantarse solo en el área frente a Badía y volver a superarle. Sin embargo, la suerte volvía a esta en contra del conjunto visitante, ya que Benzema se encontraba en posición incorrecta por milímetros, y el VAR volvió a anular el tanto merengue.

Este nuevo aviso pareció hacer despertar a los locales, que, inmediatamente después, se acercaron por primera vez a la meta de Lunin. En primer lugar, con un zurdazo de Nico, para el cual el meta ucraniano tuvo que emplearse a fondo para mandarlo a córner. Poco después, con un golpeo de Lucas Boyé desde fuera del área que en esta ocasión Andriy detuvo con menos complicaciones.

Poco tardó el conjunto blanco en recuperar por completo el control del juego, aunque ahora el Elche parecía mejor plantado en el campo, y la superioridad del conjunto blanco no se traducía al igual que antes en un peligro constante. Y con ese panorama, y con un parón por una emergencia médica en la grada, el colegiado decretó el final del primer tiempo, y el conjunto blanco se marchó a los vestuarios con la sensación de que podría haberse ido con un marcador mucho más amplio.

Una segunda mitad más igualada con el mismo resultado

Tras la reanudación, el partido comenzó con un signo totalmente distinto. Y es que los ilicitanos comenzaron con un fútbol que no se había visto en ningún momento de la primera mitad. Y antes de que pasase un minuto, Lucas Boyé volvió a tener un golpeo franco desde el punto de penalti, que se marchó muy por encima del larguero de la meta defendida por Lunin.

Se intentó sacudir el Madrid del dominio de los locales en el comienzo de la segunda mitad, con un golpeo lejano de Benzema, que obligó a Badía a volar con dirección a su palo derecho para lanzar la pelota lejos de la portería. A lo largo de los siguientes minutos, el dominio se fue repartiendo entre ambos equipos, pero se hallaba muy lejos del monólogo visto en la primera mitad.

Sin embargo, poco a poco, el Madrid volvió a dormir el partido a través de largar posesiones, que se empezaron a traducir en una cercanía cada vez más evidente a la zona de tres cuartos del Elche. Fue Toni Kroos quien filtró un balón a la espalda de la zaga ilicitana, para que Dani Carvajal pusiera un balón medido a Benzema, que el ariete francés mató con el pecho y envió al fondo de  la red. Sin embargo, la posición del lateral español también era incorrecta, por lo que el VAR anuló por tercera vez en la noche un gol a los visitantes.

El Madrid volvía a hacerse con el dominio de la pelota. Pero, a diferencia de lo acontecido en la primera mitad, el Elche sí generaba una sensación de poder crear peligro al contragolpe. De hecho, en una salida de los locales a la contra, un centro lateral para Clerc estuvo cerca de convertirse en el empate. Sin embargo, Lunin apareció con una intervención salvadora al cabezazo del futbolista local.

A diferencia de lo que hacía intuir la primera mitad, si bien los de Ancelotti dominaban el juego, la sensación era que los ilicitanos podían meterse en el partido en cualquier momento. Pero cuando más apretaba el Elche, Rodrygo frotó la lámpara para dejar con el tacón un balón a Benzema en la frontal del área, y el Balón de Oro puso el balón en el fondo de las mallas con un golpeo extraordinaria, siendo el tercer tanto del francés en el partido, pero el primero en subir al marcador.

Un gol que terminó de matar el partido, ya que, desde entonces, el Elche bajó los brazos, y ambos conjuntos parecían esperar el pitido final de Gil Manzano, con la mente puesta en la undécima jornada. Lo cual no implicó que el Madrid no fuera a aprovechar las que tuvo, y es que Valverde estuvo a punto de sumar el segundo a su cuenta goleadora, con un disparo que Badía acertó a despejar con la cara. Pudo meterse también en el partido el Elche de la mano de una incursión de Ponce en el área, pero el mediocampista la mandó por encima del larguero.

Y cuando el Elche ya había colgado los guantes, Tchouaméni puso a los suyos a correr en una de las últimas del partido. Puso un balón en profundidad para Rodrygo que, una vez más, la puso con música para que Asensio superase a Badía y redondease el encuentro con el tercero de los merengues. Una jornada intersemanal de la que el Madrid sale más reforzado, y el Elche aún más hundido.