Eliminación dantesca del Atlético en Champions

Se auguraba una noche de infarto en el nuevo Metropolitano. El Atlético de Madrid debía ganar si quería seguir con posibilidades de continuar en la UEFA Champions League teniendo en cuenta la previa victoria del Oporto en Bélgica. No había otra opción. No había otro camino. Solo quedaba ganar, ganar y volver a ganar.

Pero el partido empezaba con el suceso que más difícil ponía la victoria de los rojiblancos: una mala salida de balón de Antoine Griezmann provocó que Diaby quedara solo ante Oblak y el francés no dudó en ejecutar a la escuadra contraria del portero esloveno. Había que remar a contracorriente, pero si algo ha sabido hacer el Atlético de Madrid a lo largo de este tiempo ha sido reponerse a las adversidades: una jugada maradoniana de Carrasco pondría el empate en el encuentro, pero pocos minutos después Hudson Odoi volvería a poner por delante a los alemanes. El partido se esperaba de alta tensión pero el guionista del partido me parece que se ha excedido. Se llegaría al descanso con resultado desfavorable para los colchoneros, pero Simeone no dudaría en hacer cambios al descanso: Saúl y de Paul entrarían en el lugar que dejaron Correa y Hermoso, el cual había perpetrado una actuación dantesca.

El Atlético sería un equipo muy plano en la segunda parte: dominaría constantemente la posesión del balón pero no terminaba de finalizar con claridad sus ocasiones. Al fin y al cabo es lo que lleva sucediendo toda la temporada. Uno de los cambios que realizó el Cholo, como es Rodrigo de Paul, sería capaz de encontrar la portería de los alemanes en un disparo desde la frontal del área.

El Atlético arrear y hasta el final de los minutos pero nos encontramos con el primero de los pitidos finales que hubo: el árbitro pito penalti con el partido finalizado por mano del Leverkusen. El belga Carrasco asumió los galones en el momento clave pero erraría el penalti y el Atlético quedaría matemáticamente eliminado de la UEFA Champions League.

Hay que sacar muchas conclusiones de esta eliminación. Al fin y al cabo lo más llamativo es el penalti fallado en el último minuto, el rechace mandado al larguero por Saúl y que Carrasco sacó de debajo de los palos el remate a Reinildo, pero no podemos olvidar que el Atlético de Madrid solo ha conseguido ganar un partido de los que lleva de Champions y el gol de la victoria lo marcó en el último minuto. Ha sido una actuación lamentable en un grupo en el que se le presuponía como primero. Porque cabe recordar que el Atlético está eliminado a falta de una jornada para que finalice la fase de grupos. Es una situación en la que se deben plantear cosas y continuidades de ciertas figuras pertenecientes a la entidad. Es un duro varapalo del que no sé si Simeone se va a recuperar.