Un Málaga en el abismo contra la ilusión burgalesa

Málaga y Burgos se citan mañana sábado en el estadio de La Rosaleda en un encuentro entre dos equipos que necesitan enderezar su rumbo. Los andaluces llegan en un momento muy complicado, en la parte baja a cinco puntos de la salvación y con un ambiente que no es el mejor debido a la delicada situación deportiva. Los burgaleses vienen de reencontrarse con la victoria cuatro partidos después y  sueñan con volver a engancharse al tren del ascenso, ahora a cuatro de las dos plazas que otorgan el ascenso directo.

Málaga: otra oportunidad para enderezar la situación

El Málaga tan solo ha conseguido una victoria en los últimos seis partidos, 1-0 contra el Alavés hace tres jornadas. Un bagaje escaso para un equipo que lleva una temporada para olvidar. Actualmente  se encuentra penúltimo, a cinco puntos de la salvación. Todo esto hace que el ambiente en la ciudad está muy crispado en contra de la directiva y la falta de autocrítica que desde dentro del club no se ha producido. Por ello, la necesidad de victoria mañana es capital para una plantilla que, por calidad, se le presupone mucho más arriba en la clasificación de lo que está demostrando. Un triunfo ante uno de equipo situados en la zona alta como es el Burgos supondría acercarse un poco más a los rivales directos y una mejora en el ánimo de los jugadores para rebajar la presión.

En el aspecto deportivo, Pepe Mel, cuya destitución se ha rumoreado en estos días, no podrá contar todavía con Escassi, Genaro y Ramón, sumados a las ausencias de larga duración. Sin embargo, las incorporaciones en esta ventana de enero, los extremos Lago Junior y Appiah, podrán ser de la partida. Con todo ello, la alineación para mañana podría estar formada por Yañez como portero; en la defensa, pareja de centrales con Esteban Burgos y Juande; lateral derecho para Ramalho y el izquierdo para Javi Jiménez; por delante de la defensa, N´Diaye y como interiores Aleix Febas y Fran Villaba; con Appiah en la banda derecha y Lago Junior en el extremo izquierdo. Por último, min incombustible Rubén Castro como jugador más adelantado.

Burgos: la ilusión del «burguitos» como principal arma

Tras cuatro partidos en los que el equipo sumó tan solo un punto y fue relegado de la zona de ascenso directo, el Burguitos -como así lo acuñó su técnico Calero– se reencontró con la victoria tras ganar 2-1 al Andorra en El Plantío. El equipo de Julián Calero se encuentra cuarto en la clasificación, a cuatro puntos de los puestos de ascenso directo y necesita volver a la senda de los tres puntos para no descolgarse de la pelea y de los playoffs. El propio técnico sabe que, a pesar de la situación de su rival, el partido será de máxima exigencia: «El Málaga no cumple los requisitos de un equipo que está abajo. Por circunstancias, no ha conseguido todavía enlazar dos victorias seguidas. Lo normal es que resurja y vaya hacia arriba. Lo que vamos a intentar es que no sea contra nosotros. Vamos a tratar de ahondar en su herida».

El partido de mañana, el técnico madrileño seguirá sin poder contar con Gaspar Campos, Javi Pérez, Badiashile y Andy por lesión. Por contra, recupera a Miguel Ángel Atienza y Mumo, el primero tras cumplir ciclo de amonestaciones y el segundo una vez superado su proceso gripal. Con todo esto, la alineación para mañana podría estar formada por José Antonio Caro como portero; en la defensa, como pareja de centrales, Córdoba y Grego Sierra; lateral derecho para Areso y el izquierdo para Matos; por delante de la defensa, en doble pivote: Raúl Navarro y Elguezábal; los extremos serán para Curro en derecha y Bermejo partiendo desde la izquierda; con Mourad y Juan Artola como pareja de delanteros.