El equipo de Carlos Cantero, liderado por una excelsa Gatling (13 puntos y 21 de valoración), cae por solo 3 puntos (72-69) en un encuentro extraordinario, donde estuvo a punto de forzar la prórroga.
A Casademont Zaragoza le da todo igual. No le importa el cansancio, no le afectan los viajes acumulados ni el castigado estado físico. Tampoco le influye la entidad del rival. El equipo que dirige Cantero es un bloque excelso, que dignifica un deporte llamado baloncesto; cada vez que comparece sobre la pista. Este sábado, el conjunto aragonés ofreció su enésima lección de garra ante el Spar Girona, líder de la Liga Femenina Endesa, al que estuvo a punto de sorprender en su pista. En un apretadísimo final, donde llegaron a perder por 7 puntos en el último minuto y medio, las zaragozanas cayeron 72-69, a pesar de disponer de una última posesión para forzar la prórroga.
Bastaba con ver cómo apretaba el puño al final del partido Bernat Canut, entrenador local, para entender hasta dónde exprimió Casademont a su rival. A pesar de disponer de infinidad de recursos menos, la plantilla de Cantero.
El partido arrancó como lo que era: uno de los mejores entre dos de los equipos más en forma de la Liga Endesa Femenina. El Casademont tomó la delantera ya desde el salto inicial, dejando claro que no se iba a dejar intimidar por el incalculable talento de su rival. Tras un inicio de 0-6, rápidamente brotó la calidad de las jugadoras del Girona.
Destacaron especialmente las dos estadounidenses, Sykes (21 puntos y 32 de valoración) y Gardner, que dejaron acciones de muchísimos quilates durante todo el encuentro. Pero la plantilla de Carlos Cantero no se arrugó y ofreció una gran oposición a su adversario. Especialmente acertada estuvo la capitana, Vega Gimeno
El segundo cuarto comenzó con un magistral triple de Leo Fiebich para empatar el partido. Pero el Casademont Zaragoza era en estos momentos un ciclón sobre la pista. No cesaba de anotar y, tras un nuevo parcial, esta vez de 0-9, el entrenador local, Bernat Canut, se vio obligado a solicitar tiempo muerto.Las catalanas no fueron capaces de anotar hasta que emergió la figura de Murphy desde la esquina. Su triple, completamente liberado, encontró rápidamente la respuesta de Mariona Ortiz, que también perforó el aro desde más allá del 6,75.
La intensidad del choque no decaía y ambos conjuntos plasmaban los motivos que les han llevado a ocupar los primeros puestos de la clasificación. Pudo ampliar su ventaja el Casademont, pero Serena-Lynn Geldof no acertó en varias acciones liberadas en la zona. El potencial de Gatling y la excelsa defensa de Lara González (4 rebotes ofensivos al descanso) eran entonces el referente de las zaragozanas, que llegaron con una mínima ventaja (+2) al tiempo de refresco (32-34).
Segunda parte
Tras el paso por los vestuarios, el ritmo del partido no menguó. Girona y Casademont seguían sin levantar el pie del acelerador, ofreciendo un gran espectáculo en el Pabellón Fontajau de Girona. En las visitantes continuaban brillando Vega Gimeno, que firmó un par de acciones de muchísimo mérito, y una Gatling superlativa, que gracias a un 2+1 conseguía ampliar la diferencia hasta el +6 (49-55). Sin embargo, en el tramo final del tercer cuarto el poderío catalán dejó el resultado en un apretadísimo 56-57 antes del decisivo acto.
Los últimos 10 minutos arrancaron con una falta de Mariona Ortiz mientras Laia Flores armaba el triple. La talentosa base española convirtió los tres libres posteriores y devolvió la ventaja a su equipo (59-57). Cuando la diferencia se amplió hasta los 6 puntos (65-59), Cantero solicitó tiempo muerto para rearmar a las suyas.
Llegó aquí el momento más delicado del Casademont Zaragoza, muy lastrado físicamente por los tres exigentes partidos que ha afrontado esta semana. Pero no bajarían los brazos las jugadoras de Cantero, que consiguieron reducir la desventaja hasta los tres puntos (67-64). En el último minuto, un triple de Fiebich y la enésima buena acción de Vega Gimeno hicieron soñar al Casademont. A falta de solo 4 segundos, perdía por tres y tenía posesión de balón. Pero la defensa local impidió a Vega armar el brazo y el triunfo se quedaría en casa.