«Sin oxígeno en el submarino»: El Mallorca desmonta al Villarreal en Son Moix
Los de Aguirre deshicieron el planteamiento de los Groguets, que se vieron superados durante gran parte del encuentro
Previa: Choque de estilos y necesidades
‘Son Moix’ preparaba hoy un duelo espectacular entre dos equipos muy distintos. Sus estilos, a pesar de chocar en el campo, (muy seguramente) iban a dejarnos uno de los partidos de la jornada, sin ninguna duda.
Los ‘guerreros’ de Javier Aguirre, peleando por las posiciones altas esta temporada, volvían a enfrentar un reto en su campo. Aunque con la mente muy fría y sin pensar en su posible inferioridad, pues los ‘diablos’ ya han dejado detalles de lo que son capaces y quieren acompañar su buen momento y su estilo sorpresivo con otros tres puntos.
Quique Setién, en cambio, con un difícil puzzle a resolver por delante, se presentaba en el estadio de los baleares para cortar la mala racha de tres partidos consecutivos sin ganar.
A pesar de tener la cabeza de Muriqi como gran amenaza y la férrea defensa local como gran reto, no querían dejar pasar esta oportunidad para reivindicar el estilo de juego tan defendido por su míster, con la posesión como gran estandarte ante las rápidas contras del RCD Mallorca.
Sin dudarlo, un duelo muy curioso de observar, con dos formaciones en extremos muy alejados y con los nervios a flor de piel para los espectadores.
Primera parte: Kadewere y las ilusiones efímeras
Sánchez Martínez dio inicio al encuentro con los dos equipos muy concentrados y decididos: El Mallorca, presionando muy arriba y con un marcaje muy potente sobre los mediocampistas rivales (el «alma de la fiesta» de Setién); El Villarreal, como siempre, con el balón en los pies y construyendo poco a poco.
Y esa misma construcción obstruyó al ‘Submarino amarillo’. El Mallorca apostó por una presión muy dura, haciéndole cometer bastantes errores en los primeros 15 minutos al Villarreal, aunque ninguno de los dos equipos tomó la directa.
Solo Foyth, a pelota parada, y Dani Rodríguez, en un balón dividido, consiguieron rozar la portería.
Pocos minutos después de una disputa a balón parado, Pepe Reina regalaba la pelota en su propia área y entre Vedat Muriqi y Tino Kadewere ponían el 1-0.
El zimbabuense se estrenaba en La Liga y, acto seguido, una rabieta de Manuel Trigueros dejaba con diez al Villarreal. Este error tan grave marcó un punto de inflexión en el partido, dificultando las cosas aún más a los ‘Groguets’ en apenas tres minutos.
El mismo Kadewere se convirtió en una pesadilla para Albiol y Pau Torres, que no conseguían frenarlo en sus arrancadas.
El número ’17’ generó mucho peligro, pero además, se «metió en el bolsillo» a Daniel Parejo con su marcaje y consiguió frustrarle en muchos momentos del primer período inicial.
El juego redució su intensidad, pero durante la mayor parte del primer tiempo, pudimos observar a un Villarreal CF muy perdido y poco reactivo ante el bloque mallorquín.
Aun así, los de Aguirre desconectaron a dos minutos de finalizar los 45′, y José Luis Morales aprovechó la oportunidad para enchufarse directamente en el partido.
Aunque esto sería simplemente una utopía para los de Setién, que a pesar de pensar en sus nuevas posibilidades, estas se vieron reducidas a cenizas con un cabezazo desde el borde del área de Dani Rodríguez.
Con el 2-1 en el marcador, la afición volvía a respirar, aunque Vedat «el pirata» Muriqi no se sació y asustó notablemente a Reina en un uno contra uno del que salió vencedor el veterano español.
El colegiado pitó el final y ‘Son Moix’ sonrió tras un gran papel de sus ‘diablos’.
Segunda parte: Tardanza con consecuencias
Comenzó la segunda parte con un Mallorca en las nubes y un Villarreal similar al del primer tiempo, aunque los ‘Groguets’ bajarían (de nuevo) muy rápido las expectativas de los locales con un gol precoz.
Samuel Chukwueze y José Luis Morales combinaron frente a la frontal y el nigeriano finalizó de manera excelente.
El Mallorca, tras el error en defensa, se desconcertó y observó cómo los de Quique Setién se plantearon más verticales, generando más en poco tiempo.
A pesar de la desconexión momentánea, parecía que Muriqi, que estaba siendo de los mejores del encuentro, iba a desempatar tras un «pase de la muerte» de Tino Kadewere, pero Sánchez Martínez inhabilitó el gol y dejó respirar a los Amarillos.
En tan solo diez minutos, a ambos equipos les dio tiempo a irse completamente del partido y a volver con más fuerza.
De esta manera, en una jugada a balón parado, Dani Rodríguez desempataba de nuevo el partido (también de cabeza), batiendo a Pepe Reina tras recibir un mal marcaje de Pau Torres y reactivando a los Baleares.
Muy poco después, Pablo Maffeo introducía un centro quirúrgico al área y Raíllo, que se encontró solo, dejó los honores a Muriqi para hacer su noveno gol en Liga y poner el 4-2.
Setién puso «cara de póquer» e introdujo cambios con la esperanza de poner pilas nuevas a su máquina, que hacía ya tiempo que no acababa de arrancar, a pesar de las intenciones con su nuevo sistema.
A pesar de sus intentos, el Villarreal no acabó de encontrar el hueco a 20 minutos del final, y tras un balón parado, dejaban que Kang-In Lee se marchase totalmente solo ante Pepe Reina.
Afortunadamente (para ellos), el surcoreano falló, ya cansado, y se lamentó terriblemente tras rozar el palo derecho.
Muriqi lamentó también una ocasión similar dos minutos después, y esta vez sí, paró Reina con su bota dejando ver sus reflejos.
El partido se convirtió en un constante de idas y venidas para los dos equipos, prácticamente sin pasar por el medio del campo. Dejaron espacio para la verticalidad y los pases muy largos para sacar provecho en las segundas jugadas, y así la tuvo Morales, que, como Lee, rozó el palo diestro.
En otra de sus oportunidades, el Villarreal aprovechó los cambios y la frescura del Mallorca, que necesitaba aposentarse, y Foyth puso un centro que Raijkovic paró de manera excelsa.
Ambos conjuntos, octavo y noveno respectivamente, comenzaron a darse cuenta de su situación en la tabla y el partido pareció cambiar por completo.
Se mostraron mucho más activos en los minutos finales y, aunque con necesidades diferentes, lucharon cada minuto desde el 80′.
Así terminó el encuentro, con un Villarreal superado y un Mallorca soñando en Europa. Setién, sin poder hacer nada, no consiguió dominar, ni siquiera, su mejor aspecto: la posesión.
Conclusiones: Dominio y disfrute
Javier Aguirre llegó al RCD Mallorca con un objetivo: Sorprender. Y así cumplió.
Ganó al Real Madrid, luchó dignos partidos y, hoy, venció a un Villarreal en pleno estado de cambio. Luchó con sus armas y, como bien dice el dicho, en casa del herrero, cuchara de palo.
Los ‘Groguets’ no encontraron solución en muchas facetas del partido y su defensa se deshizo como una aspirina prácticamente en cada contraataque de los mallorquínes.
Sin duda, este partido es para sacar conclusiones favorables, por un lado, y para reflexionar (y mucho) para el otro.
Si realmente quieren llegar a Europa, para Setién, la posesión no es el camino. Aunque así lo es la verticalidad para los ‘diablos baleares’, que se divierten jugando y ofrecieron, una vez más, un espectáculo.
A destacar el partido de Tino Kadewere, Muriqi y, el ‘MVP’, Dani Rodríguez. Los tres abanderados del Mallorca, que guiaron al público a la euforia máxima ante un rival de máximo nivel.
