El líder da un golpe encima de la mesa
A pesar de caer por 2-0 al descanso, el Eibar se coloca líder en solitario, con 4 puntos de ventaja sobre sus perseguidores, tras remontar
El líder es más líder. Sabía el Eibar que todos sus perseguidores, con excepción del Granada, se habían dejado puntos en esta jornada. Una oportunidad pintiparada que tenía el cuadro guipuzcoano para echar raíces en el liderato de la categoría de plata con diez jornadas por disputarse. Y no la dejó pasar, aunque se lo tuvo que trabajar, no solo futbolísticamente, sino también mentalmente.
Porque es muy difícil que cuando un equipo se va 2-0 abajo en el descanso y está apunto de encajar el 3-0, logre en apenas un cuarto de hora darle la vuelta completamente al marcador. Eso es lo que hizo el Eibar en Anduva, cortando la racha de un Mirandés que, aunque tiene una posición ciertamente privilegiada, sigue inmerso en la lucha por la salvación de lleno.
El encuentro comenzó con una fase de tanteo, sin un dominador claro y con ambos equipos testando a su rival con pequeñas escaramuzas. Parecía que el juego directo del Eibar se iba poco a poco imponiendo y Sergio Álvarez tuvo la primera clara del partido que desvió lo justo Pinchi para impedir que el balón cogiese dirección portería. Pero la realidad era otra. El Eibar no mostraba contundencia en ciertas acciones y en defensa dejaba sensaciones de poca fiabilidad, si bien los de Joseba Etxebarría no encontraban aún los caminos a la portería de Luca Zidane.
Pero cuando los encontró, fue para asestar el primer golpe. Lo daría quien se ha mostrado a lo largo de la temporada como uno de los mejores jugadores de toda la categoría. Raúl García recoge un balón en tres cuartos de campo, deja atrás a tantos defensores que le salen a su paso y bate por bajo a Luca Zidane. Golazo del delantero cedido por el Real Betis que alcanzaba los trece goles en una campaña para enmarcar con también cinco asistencias.
El gol hizo que el Eibar se cayese como un castillo de naipes ante el viento. Un desmoronamiento que hizo que Luca Zidane salvase a su equipo del 2-0 en tres ocasiones a remates del propio Raúl García que veía como el arquero francés le negaba el doblete. Porque el decimocuarto gol no llegó, pero si la sexta asistencia. Ya que no podía marcar, el ariete optó por asistir a Gelabert que ante Luca Zidane picó el balón de forma excelsa para castigar al Eibar a solo dos minutos del descanso. Los armeros veían como su incomparecencia tras el 1-0 le costaba dejar el partido muy cuesta arriba en el descanso.
Pero sin nada que perder, Gaizka Garitano movió su libro de trucos en el descanso. Cambió el esquema y dio entrada a un Aketxe que sería clave en lo que vendría después. No de mano, porque el que arrancó creando peligro el segundo tiempo fue el Mirandés. Primero Pinchi tras jugada sensacional de Juanlu y después Gelabert rozaron el 3-0 que hubiese sido poco menos que definitivo. Pero Zidane mantuvo a su equipo dos goles abajo. Porque llegaban los dieciséis minutos mágicos del líder.
Justo cuando se cumplía la hora de partido aparecieron Yanis y Aketxe. El primero asistió al segundo para que batiese con comodidad a Alfonso Herrero tras una buena jugada por izquierda. Se metía el líder en el partido e iba a doblar el golpe. Solo tres minutos después, papeles casi cambiados. Falta lateral que bota el autor del 2-1, le cae el balón a Bautista y el ariete cede a Yanis para que sea él quien ponga el 2-2. En apenas ocho minutos segundos, se pasó de un casi cantado 3-0 a un 2-2 que dejaba el partido totalmente abierto.
Porque tras el empate, si en la primera parte fue el Eibar el que se desmoronó, ahora lo hizo el Mirandés. Los jabatos empezaron a titubear y dudar y el Eibar crecía y crecía con el paso de los minutos. Por las bandas llegaba con facilidad y aunque no creó claras ocasiones más allá de un error de Alfonso Herrero al dejar un balón suelto que salvó Prados, todo el mundo en Anduva veía que el 2-3 era mucho más probable que llegase antes que el 3-2. Y la lógica, ésta vez, se hizo notar porque Bautista, en jugada personal se inventa un potentísimo disparo a la escuadra que desataba la euforia en Eibar.
Un gol que fue una losa de que el Mirandés no pudo reponerse. No logró inquietar a Luca Zidane y el Eibar supo amarrar la victoria tras su gran remontada que lo lleva a colocarse líder con una autoridad y ventaja de 4 puntos de ventaja sobre sus perseguidores. Ahora ambos miran a la próxima, la trigésimo tercera. Para los rojillos eso implicará viajar hasta Ponferrada, donde visitarán a la Deportiva, que marca el descenso, el domingo a las 16:15 horas. Para los armeros también supondrá jugar ese mismo domingo, pero a las 14:00 horas cuando el Andorra visitará Ipurúa.