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El Villarreal saca oro de un Real Madrid presente en cuerpo pero no en alma

Real Madrid 2 3 Villarreal

La jornada 28 de La Liga enfrentaba a dos de los mejores equipos de la competición, aunque el desarrollo de la temporada hacía que cada equipo tuviese objetivos muy diferentes con el partido: el Real Madrid afrontaba este partido como un ensayo de cara al partido de Champions, pues pese a que salieron a buscar la victoria los 12 puntos de distancia respecto al Barcelona son una distancia que se asume como prácticamente imposible.

Por su parte, el Villarreal necesitaba los puntos para afianzarse en posiciones de Europa League y seguir, en la medida de lo posible, la estela de la Champions que iba dejando la Real Sociedad de Imanol Alguacil, ubicado a 4 puntos de distancia.

El primer acercamiento lo firmaría el conjunto blanco desde la esquina, cuando Asensio sacó en corto para que Ceballos sirviese un preciso centro sobre la cabeza de un Rudiger que hoy recuperaba la titularidad. Al testarazo respondió Reina con una estirada igual de soberbia, aunque todo ello fue invalidado por fuera de juego.

El partido transcurrió de acuerdo con lo esperable, con un Villarreal buscando hacerse grande a través de la posesión y con el Real Madrid queriendo penalizarla con vertiginosas contras. Vinicius, como no podía ser de otra manera, fue el encargado de comandar la mayoría de ellas.

La primera de todas con un rol al que no nos tiene acostumbrados, filtrando un balón al hueco para la carrera de Nacho, quien no supo buscarse un socio en el área. En la segunda el brasileño fue el encargado de finalizarla y su disparo se marcharía rozando el palo de la portería del veterano Pepe Reina.

La perseverancia merengue sería recompensada, aunque para ello hiciera falta aliarse con una diosa fortuna, como le sucedió a Asensio para que su pase de la muerte tocara en Pau Torres para introducirse directamente en su propia portería. El electrónico se estrenaba en el minuto 16 y las sensaciones que dejaban ambos equipos hacían indicar que no sería el único de la noche.

Las ocasiones se sucedían en un frenético partido, el cual pudo empatar el Villarreal por mediación de Álex Baena, pero el jugador groguet no fue capaz de dirigir la volea de la que gozo solo en la frontal del área y Courtois pudo embolsar fácilmente. La jugada inmediatamente después pudo suponer el 2 a 0 pero entre portero y defensa del submarino amarillo terminaron repeliendo el peligro.

A Quique Setién se le veía visiblemente descontento con la facilidad y la frecuencia con la que el Real Madrid visitaba su área por lo que decidió mover ficha antes de que fuera demasiado tarde y dio entrada a Manu Trigueros cuando se acababa de cumplir el primer cuarto de hora de encuentro, sentando al canterano Ramón Terrats. El cambio era un claro toque de atención a sus 11 jugadores, y fue un antes y un después en la primera parte.

Levó anclas el submarino en dirección a la portería defendida por Courtois y logró arribar en buen puerto: el gol que supondría la igualada. Samu Chukwueze fue quién llevó el balón hasta la red tras un sublime recorte a Nacho en el área.

La segunda mitad no gozaría de menos ritmo que la primera, y Vinicius en una jugada en solitario volvería a poner a su equipo por delante en una jugada que tuvo tanto mérito del extremo por su persistencia, como demérito de un defensa que fue más endeble de lo que debería. Antes, el técnico italiano había dado entrada a Militao en reemplazo de Alaba para afrontar la segunda mitad.

Los cambios locales los marcó por completo el encuentro contra el Chelsea del próximo miércoles, lo que dejó la llamativa imagen de Benzema siendo sustituido en el minuto 60 y con el partido lejos de estar resuelto. Esto lo confirmó el Villarreal con sus llegadas que fueron «in crescendo» según el partido se acercaba a los minutos finales.

En primer lugar el recien ingresado Morales firmó el gol de la igualada batiendo a Courtois con un disparo a bocajarro. El gol lo concedió el VAR ya que el asistente lo había anulado en primera instancia, como ya hizo minutos antes con el tanto de Mandi.

No obstante, al Villarreal aún le faltaba la campanada final, aquella que llegaría de las botas de, nuevamente, Chukwueze. Si su primer tanto ya fue de una bellísima factura, lo superó con creces al introducir el esférico por la mismísima escuadra, enmudeciendo así al Bernabéu.

Al Real Madrid no le quedaba más remedio que volcarse con todo al ataque para tratar de buscar la épica, condición que por el momento sustentaba el Villarreal. Hubo atisbos de ella cuando en los últimos compases del choque el colegiado decretó un penalti por mano a favor de los locales, y aunque Modric tenía ya el esférico en su poder, nunca llegó a cobrar una pena máxima que el VAR rectificó.

Con todas las pérdidas de tiempo, entre las que se incluyen las múltiples revisiones, el árbitro decretó 7 minutos de prolongación en los que el Villarreal tuvo que cerrar filas para mantener el valioso resultado, algo que finalmente consiguió sin muchas complicaciones.

FICHA TÉCNICA

Real Madrid: Courtois; Lucas Vázquez, Rüdiger, Alaba (Militao, min 46), Nacho; Tchouaméni (Modric, min 72), Asensio, Ceballos (Camavinga, min 75); Vinicius, Rodrygo y Benzema (Valverde, min 61).

Villarreal: Reina; Foyth, Mandi, Pau Torres, Pedraza; Terrats (Manu Trigueros, min 32), Parejo, Lo Celso (Alberto Moreno, min 67); Chukwueze (Femenía, min 91), Baena (Mojica, min 91) y Yéremy Pino (Morales, min 67).

Goles: 1-0, min 16: Pau Torres (p.p)- 1-1, min 39: Chukwueze. 2-1, min 48: Vinicius Jr. 2-2, min 70: Morales. 2-3, min: Chukwueze.
Árbitro: Amonestó a Yeremi Pino (min 24), Pedraza (min 35) y a Foyth (min 69) por el Villarreal.
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo octava jornada, disputado en el Santiago Bernabéu, Madrid.
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