El Zaragoza se da un homenaje en un día negro para el Racing
Con el 4-1 se terminaba un día negro para el Racing donde todas las desgracias le han salido a los santanderinos y todo fue a favor para el Zaragoza.
En los primeros compases, el Racing dominaba el partido a través de su juego vertical. El Zaragoza no conseguía controlar la posesión. Se llegaba casi al primer cuarto de hora y habían pasado pocas cosas en La Romareda. Ambos tenían las ideas muy claras en defensa. No tardó en liarse el partido en La Romareda. Primero la tuvo el Zaragoza. La tuvo Simeone tras un envío de Azón desde la derecha. Fue muy clara pero no acertó en el remate. Poco después, Íñigo, el capitán del Racing, vio primero amarilla y, tras revisión del VAR, roja en el minuto 16 tras una dura entrada sobre Jaume Grau. El Racing se quedaba con uno menos en el 17 de juego.
Ya en superioridad, llegó el gol. Esta vez no falló Simeone. Recibió Bebé en la esquina. Encaró a Medina y puso el centro. Golazo del delantero argentino que puso el lateral de la bota en el primer palo. La pelota cogió una comba perfecta para colarse por la escuadra de Parera. Poco después, en otra contra del Zaragoza hubo mano del portero del Racing y fue expulsado por tocarla fuera del área. Con dos menos el conjunto cántabro.
Ya con dos más el Zaragoza hizo el segundo. Golazo. Disparo directo de Bermejo que chocó en la barrera. Le cayó el rechace de nuevo a Bermejo que se sacó un zurdazo a la escuadra. El 2-0 casi sentenciaba el partido, puesto que el Zaragoza jugaba ante un rival con dos hombres menos. Al Racing se le podía hacer muy largo el partido. Monólogo local que buscaba sentenciar y antes del descanso puso el tercero. Bermejo amagó si irse por dentro en el carril del ocho. Abrió para Gámez que hizo la profundidad. Puso el centro al punto de penalti, paradón de Ezkieta al tiro de Azón, llegó al rechacee, y gol de Iván Azón. Aprovechó el delantero del Zaragoza el rechace a una primera parada de Ezkieta sensacional, pero Azón llegó de cabeza y puso el tercero para martillear de nuevo al Racing.