Sporting y Oviedo se quedan a medias

Ganar un derbi siempre es especial, pero en el caso de hoy podía serlo algo más. El Sporting buscaba la victoria para sellar la permanencia, aunque solo necesitaba un punto, y el Oviedo si ganaba podía soñar con los Playoff.

Como todo combate de nivel que se precie en los primeros compases los dos rivales se tanteaban. El Sporting tenía más posesión en este primer tramo del partido, ante un Oviedo algo más agazapado. Los locales fueron los primeros en llevar peligro a las áreas. Mal control de Tomeu Nadal, Juan Otero casi marcó pero el rechace del portero lo remató Djuka de chilena para que el portero azul detuviera el esférico. Poco después, disparo de Cote que repelió el meta carbayón. El Sporting se volcaba sobre la portería oviedista.

No estaba incómodo el Oviedo dejando dominar al rival en medio de un gran ambiente con ambas aficiones rivalizando, pero lo cierto es que el esférico les duraba muy poco. Presionaban mucho los rojiblancos. El balón era de los locales, el partido tenía ambientazo e intensidad pero los goles se resistían. Poco a poco se fue equilibrado el duelo y los carbayones también empezaron a tener llegada a la zona de peligro. De hecho, en el 39′ la estrellaron en el palo. A punto estuvo de hacer gol el Oviedo. Recibió Moro algo escorado dentro del área. Buscó sorprender al primer palo con un disparo duro pero acabó estrellándose en el palo.

En la siguiente que tuvo el cuadro azul, al filo del descanso, llegó el gol. Marcó Sergi Enrich de cabeza, con un defensa encima y poniéndola a la escuadra del palo largo, tras un centro preciso y precioso de Abel Bretones. La mejoría del Oviedo tuvo premio y se iba por delante al descanso en El Molinón.

El segundo acto trajo bajo el brazo gol, polémica y empate. Cayó Djuka dentro del área y pedía penalti el Sporting. Entró el VAR a revisar la jugada. Tras la revisión en el VAR, pitó penalti a favor del Sporting tras un agarrón de Dani Calvo sobre Djuka.  El delantero local no se puso nervioso y engañó bien a Nadal que se lanzó al lado contrario. El gol reactivó al Sporting.