Los mejores muros son de Ibiza

Un descendido Ibiza visita el Ciutat de Valencia con tal de complicarle la vida de ascenso directo. El Levante sabe que no puede fallar debido a la derrota de Eibar y a los empates de Las Palmas y Alavés. Puede ser el último tren para los granotas para poder optar a una de las plazas de ascenso a la máxima categoría del futbol español. El encuentro empezaba con 15 minutos de retraso debido a un problema de salud que ha sufrido un aficionado en la grada.

El duelo empezaba algo dubitativo ya que ninguno de los dos equipos provocaba ataques muy peligrosos. Aunque en el 10′ Soldado tenía la más clara que tiraba fuera después de una maestría de pase de Joni Montiel. Posteriormente, fue el linier pitó fuera de juego. La posesión era de más de un 75% para el conjunto de Javi Calleja que dominaba, pero no daba sensación de gran peligro. En el 16′ tras encarar y salir para dentro, Joni Montiel lanzó un mísil que entre las piernas del lateral, Germán Parreño y el larguero lo mandaron a córner. La primera media hora dejaba a un Levante dominador del balón, pero sin peligro intenso en zona de tres cuartos. Por otro lado, el Ibiza se plantaba fuerte.

Los ataques del Levante se centraban en Joni Montiel, siendo él el encargado de generar el peligro. Wesley recibía un balón de espaldas a la portería que como al más estilo de Pau Gasol pivotaba y lograba sacar un golpeo que Germán Parreño de forma heroica mandaba a córner. Añadían un minuto de descuento en el cuál el marcado mantenía el 0 a 0. La primera parte fue densa de balón para los locales aunque faltó ritmo, precisión y velocidad de ejecución de ocasiones.

La segunda parte empezaba con ese mismo poco ritmo entre los dos equipos. A pesar de que la necesidad apremiaba para el Levante. En el 53′ Rober Ibáñez salía lesionado por De Frutos, una mala noticia para los granotas. El 5-4-1 en un bloque tan bajo del conjunto de Lucas Alcaraz dejaba el juego para el Levante, pero, de todas formas, Joni Montiel y Wesley en el área era de lo poco destacable en ataque peligroso para batir a un gran Germán Parreño. En comparación a la primera parte, la cantidad de ocasiones era mayor, pero la calidad de las acciones no mejoraban.

Javi Calleja agotaba las ventanas y no podía hacer más cambios para sustituir a un Wesley mermado. El Levante no escatimaba en miedo y cargaba las bandas y la delantera de pura dinamita con Musonda, Cantero y Bouldini junto a Wesley y De Frutos. Disparos alejados de Pepelu y las internadas de De Frutos esporádicas en el área sin precisión. En el 84′ la más clara para los granotas. Un balón al área rechazado acaba en las botas de Musonda que se estrella en la defensa e Iborra, finalmente, no consigue batir a Germán.

El cuarto árbitro señalaba siete minutos de añadido. Que se convertía en uno más tras la intervención de los servicios médicos del Ibiza al portero. Tantas interrupciones y tan poco ritmo del Levante cuando tenía el balón que no conseguía poner en apuros de verdad al cuadro ibicenco. En el 94′ tenía Álex Muñoz un remate franco que se colaba por encima del larguero. El Levante tiraba una oportunidad de oro para atacar el ascenso directo. El Ibiza sumaba un punto que a nivel clasificatorio no le saca de pobre.