La derrota del Barcelona ante el Real Madrid en las semifinales de la Euroliga tiene un nombre propio y es el de Nikola Mirotic. El montenegrino fue el peor del equipo que hasta la fecha dirigía Šarūnas Jasikevičius, quien podría decir también adiós al club blaugrana.
Mirotic terminó el partido con una valoración de -2 y el propio jugador declaró luego que había sido «el día más duro» de su carrera. Y es que tan solo consiguió anotar un tiro libre y una canasta de dos, es decir, tres puntos.
Además, durante tres cuartos no fue capaz de anotar, con una terrorífica estadística de 0 de 7 triples. Todo esto ha hecho que el montenegrino, además de ser valorado como el peor del equipo junto a Sanli, sea muy cuestionado.
«Asumo mi responsabilidad. Se que tenía que hacer un buen partido porque conozco mi rol y no estuve al nivel para ayudar al equipo. Debo pedir perdón a los aficionados que nos apoyan, viajaron hasta aquí para animar y no pudimos vencer», afirmó tras el pitido final.
Y es que se trata de un nuevo fracaso con la camisetas blaugrana, por la que firmó uno de los mejores contratos del baloncesto europeo para, sobre todo, conseguir el objetivo de triunfar en la Euroliga, algo que aún no ha conseguido.
Ahora su futuro en el Barça pende de un hilo, motivo por el que le cuesta más este nuevo tropiezo: «Duelen todas las derrotas, pero esta es durísima porque no sabes si será la última oportunidad».
El 33 culé sabe que, por el momento que atraviesa el club, puede ser su última participación en la Euroliga con el Barcelona. «Sabes lo difícil que es una competición así, y terminas creyendo que puede ser la última. No sé si existirán muchas más», afirmó ante los medios.
@chemilinqui