Nunca vendas la piel del oso…
Pudo más la seguridad local que la necesidad visitante. Aguirre dio con la tecla competitiva y al Valencia parecía sobrarle el partido tras la polémica de la semana
Cuando festejas alguna cosa antes de hora, la falta de tensión puede ser una peligrosa consecuencia que te obligue a remar contracorriente cuando ya te creías fuera de todo peligro. De esa medicina ha probado el Valencia hoy en Mallorca. La falta de ambición e intensidad a partes iguales le ha pasado factura al conjunto che en Son Moix.
Riesgo cero
Una anodina e igualada primera parte en la que ninguno de los dos equipos mostró un excesivo interés por desequilibrar la contienda se disputó con un exceso de juego en el centro del campo y sin llegadas peligrosas por ninguno de los contendientes.
El Valencia parecía conformarse con un punto que le acercaba a su objetivo y el Mallorca parecía poco dispuesto a arriesgar lo más mínimo.
Sorprendió el Vasco Aguirre colocando a Lee Kang In pegado a la línea de cal y esto provocó falta de ideas en el ataque bermellón. Estaba muy lejos de Muriqi, lo que rompía una conexión que venía siendo altamente eficaz para los mallorquinistas.
Por parte valencianista, la suplencia de Kluivert, afectado por el asalto sufrido en su casa, dejaba a los del Pipo Baraja con poca mordiente en ataque y con poca capacidad de desborde y remate.
Deshaciendo el error
La segunda parte, con el coreano cerca del albanés, tomó un tinte más peligroso para los visitantes que no supieron controlar las incursiones del asiático a las espaldas de los dos mediocentros.
Fruto de una jugada así llegó el inapelable remate de Muriqi. Deshacía las tablas del marcador y mete de nuevo al Valencia en una lucha de la que ya se creía lejos. Gran centro del exvalencianista y mejor testarazo del ariete de los de Aguirre para medio sentenciar el partido.
Pasarían pocas cosas reseñables con la consabida seguridad defensiva de los locales. Solo un remate de Kluivert que sacó con una gran mano Rajkovic fue poco bagaje para los de la capital del Turia en un encuentro donde se jugaban tanto.