El Avilés hace valer el factor campo

El Real Avilés peleará por el ascenso. Supieron los realavilesinos hacer valer el factor campo al jugar la vuelta en su casa. No fallaron, a pesar de que salieron a ambos periodos algo ‘dormidos’, pero supieron rehacerse para superar al Gernika con mucha eficiencia de cara a portería, ya que convirtieron en gol tres de sus cuatro remates entre palos en el partido para avanzar a la final del play-off a Primera RFEF.

El partido comenzó con el cuadro vasco mucho más activo y metido en el partido. Salió muy dormido el Real Avilés, con faltas de concentración e intensidad que los vizcaínos no supieron castigar. Hasta cuatro saques de esquina en un corto espacio de tiempo dispuso el cuadro de Aitor Larrazabal, pero sin lograr aprovecharlos. Eso hizo que pasado el apuro, el Real Avilés empezase a crecer y nivelar el partido. No se notaban cómodos los locales, pero lograban estirarse en acciones sobre todo individuales de Primo, Iván Serrano o Isi Ros.

Al filo de la media hora la tuvo el Gernika de nuevo, pero respondió Álvaro Fernández. Ahí es donde empezaron a llegar los mejores momentos de un Avilés que empezó a dominar y jugar más en campo contrario, aunque sin lograr inquietar la portería de Altamira por el buen hacer defensivo del cuadro de la villa foral. La única ocasión avilesina fue un cabezazo de Morcillo alto en una falta lateral con la que, además, se dio por finalizada la primera parte.

Tras el paso por vestuarios se reanudó el partido nuevamente con el Gernika saliendo con varias marchas más de intensidad. Una nueva ‘caraja’ avilesina que el Gernika tampoco sabía aprovechar en esos primeros minutos, rondando, pero sin crear ocasiones, ante la meta de Álvaro Fernández. Pero, como ocurrió en la primera parte, el cuadro de Emilio Cañedo supo rehacerse y empezar a anular a su rival. Además, contó con el olfato goleador de su capitán para, en su primer acercamiento del segundo tiempo, adelantarse en el marcador. Natalio mostró su sangre fría para finalizar una rápida transición que inició Jorge con un robo en campo contrario.

Con ese gol el cuadro avilesino se aposentó sobre el césped del Suárez Puerta y obligó al Gernika a abrirse, pues ahora sí que necesitaba no uno, sino dos goles. Eso era lo que querían los locales que ahora espoleados por toda su afición iban en volandas cuando el partido se puso algo bronco por una serie de faltas que además provocaron algunos enganchones entre futbolistas. Todo se volvió a calmar con el 2-0. En una acción muy similar, con un robo en campo contrario, ahora de Edu Cortina, permitió al Avilés transitar rápido y ser ahora Primo el que definiese con maestría ante Altamira.

Un gol que hizo estallar de júbilo al Suárez Puerta que ya tocaba con los dedos el pase a la final. Un gol que además hizo hundirse psicológicamente al Gernika. Aitor Larrazabal quemó las naves en busca de la heroica, pero en el correcalles en el que se convirtió el partido con llegadas a ambas áreas, solo golpeaba el cuadro de Emilio Cañedo que lograría el tercero por medio de Jorge Fernández. El MVP del partido redondeaba su actuación con un gol que certificaba de manera segura el pase a la final ante un rival que el cuadro avilesino conocerá el próximo lunes.

Pero el Gernika no quería irse de Avilés con el marcador a cero. No lo veían justo los chicos de Aitor Larrazabal, pero la justicia en el fútbol no siempre es eso, justa. Y en esta ocasión se encontró con un Álvaro Fernández que demostró el por qué vino a la villa del Adelantado en el mercado invernal. Hasta tres buenas intervenciones en los minutos finales para evitar ese gol del honor vizcaíno, que se volvía de vacío a su casa. El Avilés, mientras, celebra, pero con cautela, pues ahora, llega la verdadera final por el ascenso.