Grecia es un lugar especial para el baloncesto y Panathinaikos una religión en el país mediterráneo. Juancho Hernangómez ya lo ha podido vivir en sus carnes, y eso que solo ha estado unas horas en tierras helenas. El jugador ha abandonado brevemente la concentración de la selección española en Madrid para firmar con su nuevo club y Atenas le ha recibido con efusivos cánticos y vítores.
Apenas pudo salir del coche que le transportó del aeropuerto a las oficinas del equipo. Más tarde, en una escueta entrevista, Juancho decía estar «muy feliz y emocionado» con el nuevo proyecto al que se suma después de dejar atrás la NBA.
Para el alero de Madrid supone un enorme cambio unirse ahora a Panathinaikos. Pese a que comenzó su carrera en España, poco después de debutar con Estudiantes en ACB se presentó al draft de la NBA, donde fue elegido en el puesto 15 por parte de Denver Nuggets en el año 2016. Allí, en Colorado, pasaría tres temporadas y media antes de enlazar diversos traspasos que le llevaron a jugar en Minnesota Timberwolves, Boston Celtics, San Antonio Spurs, Utah Jazz y Toronto Raptors. Pese a que siempre ha mantenido que su sueño era (y es) triunfar en la competición estadounidense, ahora las circunstancias le empujan a iniciar un nuevo y emocionante trayecto.
Mientras Juancho ha marchado a Grecia, su hermano Willy Hernangómez ha tomado también el camino de regreso a Europa, pero eligiendo en su caso la liga ACB para firmar por el FC Barcelona. Pese a estar en competiciones diferentes, ambos coincidirán en la Euroliga, por lo que se enfrentarán en tal competición y muy probablemente sobre el parqué. Ahora los dos están con España para disputa el Mundial, pero una vez pase apuntan a ser dos de los jugadores más importantes del panorama europeo.
@chemilinqui