El Sevilla trabaja en dos movimientos que podrían darse de forma casi simultánea. Uno de entrada y otro de salida. El club nervionense está negociando la incorporación del mediocentro Pablo Fornals (Castellón de la Plana, 22 de febrero de 1996). El centrocampista del West Ham londinense ya ha dado el sí al Sevilla para volver a LaLiga y se trabaja en ello. El castellonense ocupará el sitio de uno que saldrá del club: Oliver Torres. El mediapunta, que no es ni mucho menos imprescindible para Mendilibar y que lleva todo el verano con posibilidad de salir, tiene avanzada su llegada a Vigo.
Y es que Oliver Torres (Navalmoral de la Mata, Cáceres, 10 de noviembre de 1994) será el recambio en el club olívico de Gabri Veiga. Llegará, si lo de Fornals no se tuerce, en propiedad al Celta que hará una apuesta clara por él para darle galones en su medular. El extremeño, a sus 28 años, tuvo una participación notable el curso pasado, pero con cifras lejos de las que se esperan de él. En 44 partidos aportó 3 goles y 3 asistencias. El técnico sevillista prefiere un jugador que se adapte mejor al costado, con mejor golpeo, algo que Fornals cumple y para su llegada necesita dar una salida. Esa será Óliver Torres a pesar de que ha tenido minutos -salvo ayer- en el arranque de temporada sevillista.