El Dépor se da un festín en el Anxo Carro
El rompe el gafe con su 'bestia negra' y se lleva los tres puntos del Anxo Carro
Jornada 2 y ya se vivía en el Grupo I de Primera RFEF uno de los partidos calientes que se esperan este curso. El Anxo Carro acogía un derbi gallego entre el Lugo y el Dépor, dos candidatos claros a pelear por el ascenso. Los dos empezaron el curso jugando como locales, pero con distinto resultado. Los albivermellos remontaron ante el Teruel y se colocaron líderes en esta primera semana. Por su parte, los herculinos vivieron un acoso y derribo al Rayo Majadahonda que aguantó el 0-0 en el marcador sacando un valioso punto de un fortín como Riazor. Ahora tocaba el capítulo 2, de máxima rivalidad y en medio de un gran ambiente.
La falta de gol del Dépor en la primera jornada quedó atrás en el derbi del Anxo Carro donde los blanquiazules se impusieron con contundencia dejando atrás su gafe en el feudo albivermello. Controló el partido el conjunto de Idiakez de principio a fin anulando al Lugo de Munitis que apenas generó peligro en la meta de Germán Parreño.
El gol espabiló algo al Lugo que tuvo una opción por mediación de Sabit pero lo cierto es que se mostraba muy serio atrás un Dépor que no estaba pasando apuros y que pudo hacer el segundo. De nuevo, como sucediese en la primera jornada, vio puerta Lucas Pérez pero fue anulado por fuera de juego. En esta ocasión si lo era claro, al contrario que ante el Rayo Majadahonda. Fue un contragolpe de libro, apertura a la derecha y, tras el centro, Lucas estaba en fuera de juego cuando la envió a la red.
Buscaba el Lugo un acercamiento a través de un envío largo hacia Nacho Quintana. Quiso cederle de cabeza el esférico a Willy, pero no tuvo precisión. El marcador mantendría el 0-1 al descanso. Le costó mucho al Lugo encontrar ocasiones ante un Dépor serio atrás y que esta vez si se encontró con el gol.
Insistían los herculinos. Gran pase en profundidad de Davo, pero falló en el control el delantero cuando se podía quedar solo ante Lucas Díaz. El asistente levantó el banderín. Muy dudoso. El reloj corría a favor de un Dépor que no pasaba apuros y parecía tener controlado el partido pero necesitaba un gol de la tranquilidad. Ese gol de la tranquilidad llegaría en el 77′ en botas de Mella. Pase al hueco de Lucas Pérez, el extremo de Teo enciendió la moto y se plantó solo ante Lucas para batirlo de tiro cruzado.
Y después del segundo, llegó el tercero para sentenciar. Jugada a balón parado y volea de Jose Ángel Jurado a la red. Sentenciado el partido se gustaba el Dépor que tenía ganas demás e insistía sobre la meta de Lucas Díaz. No se movería más el marcador y los tres puntos del derbi gallego se irían rumbo a Coruña junto con la marea deportivista que celebraba en las gradas del Anxo Carro. Cuatro puntos de 6 para el Dépor y con 3 se quedaba el Lugo.