Cuando la expresión “como en casa en ningún sitio”, cobra el mayor de los sentidos. Ese es el caso del Deportivo Alavés. Dos victorias en casa, dos derrotas fuera. Es el balance de esta temporada del Alavés, que se impuso este sábado por 1-0 al Valencia gracias a un gol en propia puerta.
El conjunto babazorro, incapaz de sumar un solo punto fuera de casa, hizo buena la ventaja conseguida en los primeros compases para sumar su segunda victoria consecutiva como local. Mantener ese fortín de Mendizorroza se antoja vital para los albiazules si quieren no pasar apuros en una complicada Primera División.
El curso pasado, en Segunda, donde quedaron cuartos y subieron tras la disputa del Playoff, su balance como local fue de 13 victorias, 7 empates y tan solo 1 derrotqa en los 21 partidos jugados ante su afición. Esos resultados valieron 46 puntos de los 71 que le permitieron luchar por el ascenso.