Amin hace de las suyas en el Vero Boquete
El pichichi Amin suma y sigue para un Ourense que mantiene su gran dinámica ante un Compos inoperante que vive su segunda derrota consecutiva en casa
El Vero Boquete vivía su tercera batalla del curso tras un triunfo pletórico y una derrota polémica. Una tercera batalla en la que el Compos recibía la visita del Ourense para vivir el primer derbi gallego del curso. Un Ourense que llegaba en un momento dulce en liga y con un Amin con la diana de cara a gol bien ajustada.
El Ourense asaltó el Vero Boquete de la mano de su pichichi Amin que sigue de dulce de cara a gol y aúpa a su equipo ante un Compos que no ofreció su mejor versión, para cabreo de la grada, y que vive su segunda derrota consecutiva en casa y sin ver puerta. Se complica la vida el equipo de Manel Menéndez.
Ponía el balón en juego el Ourense que quiso buscar rápido el área rival y que desde el principio iba a presionar arriba la salida de balón de los blanquiazules que en su primera posesión buscaron llevar peligro pero se le quedó pequeño el campo a Riki Mangana corriendo la banda. Ambos equipos ejercían presión alta en los primeros compases del duelo buscando robar en zona de peligro y no dejar construir al rival.
Pasaban los minutos en el derbi sin ocasiones de gol. Mucho juego en medio campo y confrontación pero poca emoción en las áreas. Al menos hasta que en el 22′ tuvo una llegada el conjunto local que bien pudo suponer el primero con un disparo de Jordan desde la frontal que se fue alto por poco. Si llegó en el 26′ el gol en el área rival y, como no podía ser de otra forma, salió de las botas del pichichi Amin que, muy solo en el área, batió a Pato tras una gran asistencia de Ballardo.
El gol cayó como un jarro de agua fría a una grada más cabreada de lo normal con su equipo que no acababa de encontrar el camino para comenzar una remontada que se antojaba más que necesaria mirando la clasificación. El Ourense, con el marcador a favor, se replegó atrás para dificultar las intentonas de un cuadro blanquiazul al que le faltaban ideas.
Aún así, los locales consiguieron llegar en un par de ocasiones poniendo balones que buscaban a un Manu Barreiro que no encontró remate a puerta. El primer acto daba sus últimos coletazos y no consiguió el Compos inquietar la meta de Marqueta y poner la igualada en el marcador. Al descanso, 0-1 en el luminoso.
En el segundo acto, la primera opción sería a balón parado para los locales con un saque de esquina que puso Parapar y que parecía defectuoso pero al que golpeó Manu Barreiro haciendo intervenir a Marqueta. Salió a buscar el empate el conjunto de Manel Menéndez que quería tener más balón e irse más ataque pero siempre fallaban los últimos metros. Partido soso el que estaba viviendo la parroquia compostelana.
Pudo llegar el empate en el 57′ con una jugada por banda izquierda que acabó con Jaime Santos poniendo un balón al corazón del área donde no remató mal, arriba, Fer Beltrán cuando tenía todo a favor. A balón parado probó Jordan con un lanzamiento de falta que se marchó por encima de la meta de Marqueta. El balón era de los locales que mantenían el partido el campo rival pero sin conseguir el objetivo.
De nuevo en el 77′, en una segunda jugada, apareció Manu Barreiro para armar una ocasión cuando parecía que no habría nada y obligar a Marqueta a hacer una gran intervención. Se le resistía el tanto a los locales que se pondrían en apuro si vivían una segunda derrota consecutiva en casa. Casi lo logra Parapar de cabeza pero de nuevo apareció Marqueta.
Un Parapar que minutos después hizo una gran jugada por banda internándose en el área y dejándole un caramelito a Manu Barreiro que la mandó alta. En el último suspiro de partido primero Manu Barreiro y después un compañero estuvieron a punto de poner el empate y dejar un punto en Compostela pero respondió bien Marqueta. Lucho hasta el final el conjunto local pero no llegó el gol .
El pichichi Amin suma y siga para un Ourense que mantiene su gran dinámica ante un Compos inoperante que vive su segunda derrota consecutiva en casa y sin ver puerta.