El Levante UD hunde el barco vikingo desde la esquina
La Liga F volvió a rodar sobre el césped del Alfredo Di Stéfano para acoger al Levante UD de José Luis Sánchez Vera en el partido correspondiente a la sexta jonada de la temporada. Ambos equipos llegaron hasta el partido sin conocer la derrota en liga, aunque la estadística se rompió en favor de las granotas que consiguieron hacerse con los 3 puntos en el templo vikingo.
El conjunto granota se impuso a su rival, tras una primera parte en la que se mostró muy por encima de su rival, a pesar de no contar con una gran canidad de ocasiones de peligro. La lluvia propuso un estilo de juego rápido que los dos equipos trataron de utilizar a su favor, a pesar de una actuación arbitral controversial, en la que la polémica estuvo en primera línea y arañó hasta un total de 7 minutos de descuento en la segunda mitad.
El Levante marca el ritmo en el Di Stéfano
El Real Madrid saltó al terreno de juego en busca de ejercer una presión alta en zona de tres cuartos para buscar hacer daño a la armadura compuesta por la pareja de centrales levantinista, María Méndez y Silvia Lloris. La pizarra de Alberto Toril saltó al ruedo con una novedad en defensa que posicionó a Ivana Andrés fuera de su posición habitual, en el lateral derecho, en lugar de Ohiane Hernández o Kenti Robles. Una alternativa que, a pesar de que el entrenador cordobés ya la probó en varias jornadas la temporada pasada, hoy dejó ver una combinación inusual entre la capitana y Naomie Feller por el lateral derecho.
Paula Fernández abre el camino
El Levante UD estaba mejor asentado que su rival sobre el terreno de juego, a pesar de que en los primeros minutos no contó con muchas ocasiones que incomodaran a Misa Rodríguez. Aunque esto cambió en el 11 de partido cuando el conjunto granota desde el saque de esquina. El primer córner del partido terminó sacando oro de la portería del Real Madrid, después de que el centro de Ángela Sosa terminara en el corazón del área y en las botas de Paula Fernández, que terminó simulando un gol fantasma en un primer momento, a pesar de que Rocío Gálvez trató de despejar el esférico, pero que terminó alcanzando la red, tras un último empujón de Alba Redondo. El gol, finalmente, se sumó a la cuenta personal de Fernández, que superó al línea de gol y se estrenó en liga con el primero del encuentro.
Tanto antes, como después del gol, la figura de Gabi Nunes en el cuadro granota puso contra las cuerdas al Real Madrid, que tuvo que valerse de que las delanteras ayudaran en defensa para cubrir, sin riesgos, a la jugadora carioca. Por lo que Linda Caicedo tuvo que acercarse hasta su propia área para colaborar en defensa. Principalmente, porque después del gol, el Levante UD pareció animarse en ataque y protegió todavía más la posesión del balón, evitando que las locales estuvieran cómodas sobre el césped.
El plan blanco se muestra desordenado y sin ideas
En el minuto 21 de partido, la polémica desató los silbidos y críticas de las gradas de Valdebebas, tras una caída de Caicedo dentro del área de Emma Holmgren, después de un posible contacto de la guardameta sobrela atacante, que no concedió Sánchez Miguel. El Levante UD aprovechó las dudas de su rival para adentrarse entre la muralla madridista y pudo hacerle todavía más daño, gracias a la velocidad de Paula Tomás por la banda izquierda y el estilo de Sosa por la derecha que desbordó a la defensa blanca.
La primera mitad estuvo completamente teñida de azulgrana, a pesar de que las jugadas encabezadas por Alba Redondo no consiguieran volver a cantar gol en la primera parte. Las figura de Andonova también se sumó al ataque de una forma más activa y junto a la albaceteña consiguieron deshacerse de Katehellen Sousa haciendo fácil lo difícil y corriendo por la derecha, casi sin marca y con facilidad.
La pizarra de Sánchez Vera se lleva los 3 puntos
El Real Madrid retomó el partido con una filosofía muy diferente. El conjunto blancó salió para pelear con uñas y dientes lossegundos 45 minutos, apretando a las defensas rivales y valiéndose del juego asociativo entre Feller y Caicedo, que volvieron a encontrarse tras la pasividad que mostró el equipo en el primer tiempo. Tanto que, antes del minuto 50 de partido, las tablas volvieron a lucirse en el marcador, después de unos minutos definitivamente blancos. Un pase de Toletti para Olga Carmona, que recibió en la izquierda encontró a la cafetera dentro del área después de un centro a media altura, que la colombina solo tuvo que empujar hasta el fondo de la red.
El Real Madrid se reactiva tras el descanso
El partido cambió totalmente de dinámica y el Real Madrid se mostró ofensivo, resiliente y convencido de luchar por los tres puntos, a pesar de que el Levante no bajara los brazos. Las granotas, que no se esperaron la respuesta de su rival ante los sucedido en la primera mitad, tuvieron que reponerse en muy poco tiempo al nuevo contexto que reflejaba el marcador.
Sobre el 60 de partido, la polémica volvió a aparecer tras un fuera de juego que cortó una ocasión de peligro en favor de las locales. La jugada, que le costó la cartulina a Caicedo y la expulsión a un par de componentes del cuerpo técnico madridista, estuvo predecida de otra jugada anterior, en la que una posible mano de Toletti en zona peligrosa, pudo cambiar mucho las cosas. La jugada anulada por posición antirreglamnetaria desató las críticas dentro y fuera del campo, y provocó tanto enfado como sopresa en el graderío blanco.
Pero la colegiada y Gabi Nunes les echan el freno
Algo que no mejoró tras el segundo gol del Levante UD, que llegó en el 67 de partido, gracias a un cabezazo de Gabi Nunes, nuevamente, desde el saque de esquina, que supuso la tercera diana de la brasileña esta temporada.
La salida al campo de Daniela Arques en el cuadro granota renovó las pilas del centro del campo en el Levante UD. La ex del Alhama el Pozo, que jugaba algo más adelantada de lo que lo hacía Anna Torrodà, sumó en ataque al equipo y facilitó el juego de Redondo y Nunes en zona de peligro. Aunque ninguno de los dos goles llegaran de una jugada.
El reloj es uno más en el juego del Levante UD
El reloj jugó en contra de las locales, que necesitaban empatar el encuentro para no dejarse puntos en liga. La fuerza de voluntad de Feller, sumada a la energía de Athenea del Castillo, que entró en la segunda mitad, trataron de acelerar el partido a su favor, a pesar de que las prisas por pisar el área de Hemgren provocaron errores que las alejaban de su objetivo. Por lo que, a falta de 10 para el final, Toril optó por jugar una de sus últimas cartas, sacando a Carla Camacho en lugar de Ivana Andrés, lo que cambió el dibujo y reflejó una obvia apuesta ofensiva. Aunque el Levante y su estrategia defensiva que sejó ver hasta un total de cinco jugadoras en la última línea le ganó la partida a su rival, principalmente, gracias a contar con el tiempo a su favor.