El Levante UD cambia la norma de los derbis más de 760 días después

Uno de los partidos más esperados de la semana se jugaba en la capital del Turia. El Levante UD ha abierto las puertas de su estadio principal, el Ciutat de Valencia, para recibir a lo grande al otro equipo de la ciudad en un duelo a 90 minutos en el que no solo estaban en juego los 3 puntos. Y la afición ha respondido con creces.

Tras e partido, el equipo anfitrión, con Jose Luis Sánchez Vera al mando, se mantuvo invicto en liga, con una racha de tres victorias consecutivas, aunque con 3 empates a sus espaldas, lo que lo convierte en el único equipo, junto al FC Barcelona, que todavía no ha perdido ningún encuentro de liga. Por su parte, el Valencia CF asumió el encuentro con 11 de los 18 puntos posibles en el casillero, con una racha de cuatro partidos sin perder, que terminó sobre el césped del Ciutat con una jugadora menos.

El partido, que contó con más de 6200 aficionados, arrancó tras la un par de homenajes en los que el Levante UD quiso visibilizar su cantera femenina, presentando en el templo del levantinsimo a las diferentes equipos de todas las categorías inferiores. Además, tanto el club granota, como los aficionados también quisieron homenajear a la guardameta blanquinegra y campeona del mundo, Entih Salón, a pesar de que esta no saltara al verde, a pesar de entrar en la convocatoria, debido a su reciente lesión en el menisco de la rodilla derecha y tras un minuto de silencio en memoria del jugador exgranota, recientemente fallecido, Raphael Dwamena. 

Duelo a gran escala en el Ciutat

Las ideas claras de las locales y la velocidad de Mayra Ramírez en la banda derecha hicieron sudar la camiseta a María Molina durante toda la primera mitad. El Levante UD parecía mucho mejor plantado que su rival y el juego en transiciones facilitó que el equipo avanzara rápidamente sobre el verde, gracias al apoyo de las bandas, capitaneadas por Ramírez y Gabi Nunes. Aunque el Valencia CF también sabía cómo ajustarse al ritmo de partido y se adaptó en los primeros minutos, en los que tanto Chacón por medio, como Maca Portales por la izquierda quisieron probar fortuna y atosigar tanto a la defensa como a Holmgren.

Colombia determina el derbi

El partido no podía entenderse sin la intensidad propia de un derbi y ambos equipos cumplieron con lo esperado. El primer cuarto de hora estuvo definido por la concentración de la defensa constantemente en duelo con la creatividad de las delanteras, lo que dejó ver un partido repleto de oportunidades de todos los colores. Aunque la más peligrosa llegó sobre el 9 de juego de las botas de Alba Redondo, que disparó fuera, dentro del área, tras encontrarse con el balón en la zona de peligro. Un error que salió caro y que pesó mucho más cuando el Valencia CF abrió la lata un par de minutos después.

En el 11 de juego un pase largo en profundidad de Claudia Florentino encontró a Chacón, que ya había avisado en un par de ocasiones a María Méndez, que se valió de su velocidad para hacerse con el esférico. La colombiana se adentró en el área, a pesar de la marca, y batió a la guardameta sueca, que poco pudo hacer para mantener el empate.

El ambiente en el Ciutat de Valencia se caldeó por momentos y antes de la media hora de partido la colegiada, Ainara Acevedo, tuvo que intervenir en varias ocasiones, e incluso le expulsó a la propia Molina, por doble amarilla, tras cometer una falta sobre la propia Ramírez. Una decisión arriesgada que dejó al conjunto de Jesús Oliva con una central menos, a falta de una hora para el final, pero que no fue la única amonestación que mostró la árbitra, puesto que Leire Baños también vio la cartulina pocos minutos después.

Remedios Ramírez: el levantinismo añoraba a su «7»

Tras el empate y con la superioridad numérica, el Levante UD se mostró más cómodo que su rival y contó con tiempo y espacio para abrirse y mostrarse sobre su feudo. El Valencia CF no tuvo otra que comprometer su flexibilidad para cubrir la ausencia de su «4» y adquirió una postura menos ofensiva, que ya no encontraba a Chacón con tanta facilidad.

El juego del Levante UD empezó a pesarle a su rival, que echó mucho de menos a Molina. En el 45 de juego, una jugada asociativa entre Ángela Sosa, Leire Baños, Antonia Silva y la propia Ramírez se hizo con el monopolio del balón y del reloj. Las granotas jugaban entre ellas en las inmediaciones del área para llevar a las defensas a su terreno y así lo hiceron para facilitarle un pequeño espacio a Ramírez. La colombiana, que no necesita casi nada para conseguirlo todo, esta vez tampoco falló y volvió a encontrarse con la red, firmando su tercer gol esta temporada, en el segundo partido que ha disputado, debido a una lesión que le impidió jugar hasta la jornada pasada. Los aficionados corearon el apellido de la «7» granota al unísono con el speaker para celebrar el segundo gol de Ramírez, que ha empatado a Gabi Nunes como máxima goleadora de su club con 3 dianas cada una.

Un gol que fue mucho más que eso, puesto que ese tanto, que supuso la victoria, también ha sido el gol que ha roto la mala racha granota, que ha conseguido que el Levante UD se lleve un derbi valenciano, después de más de 2 años.

El Levante UD sentencia a las órdenes de su capitana

El partido se retomó sin cambios tras el descanso y, a pesar de que el Valencia CF trató de volver al campo con una cara nueva, su rival no tardó en volver a coger las riendas del partido, con Ángela Sosa y Antonia Silva dirigiendo al equipo arriba. En el 51 de partido, el tercero de las granotas subió al marcador tras un saque de esquina que propuso la propia Sosa. El balón quedó suelto dentro del área, a pesar de la intervención de la defensa, que no se entendió con Canales para hacerse con el balón, y María Méndez no dudó en meter la bota para vovler a decantar el ábaco. La capitana ha vuelto a marcar en el Ciutat después de que ya lo hicera, en este mismo escenario y ante este mismo rival, la temporada pasada en el derbi valenciano que terminó con 1-1.

El partido se tiñó de blaugrana el resto del partido, a pesar de los intentos de Jesús Oliva por restaurar a su equipo desde la zona técnica. Sobre el 60 de partido el técnico valencianista optó por un triple cambio ofensivo que le dio minutos a Asun Martínez, pichichi del equipo la temporada pasada, aunque poco pudo hacer en la media hora que estuvo sobre el campo. La figura de Mayra Ramírez siguió causando estragos en la última línea blanquinegra. La velocidad y fuerza de la colombiana la hacían imparable ante la insistente, e insuficiente, marca de Claudia Florentino.

Antonia Canales impide la goleada

El Valencia CF no tiró la toalla, ni a pesar del resultado, ni a pesar del cansancio, tanto físico como mental, que hizo mella en el equipo incluso antes del descanso. El reflejo del marcador no le hizo justicia al partido de Antonia Canales, puesto que, a pesar de haber recibido 3 goles, la cancerbera mantuvo la firmeza y mostró una cara segura ante un Valencia cada vez más inestable en defensa. La guardameta chilena fue determinante, sobre todo en el último cuarto de hora de partido, para impedir un resultado todavía más abultado, puesto que le cortó el grifo a Ramírez en más de tres ocasiones, impidiendo que la MVP se marchara con hat-trik.

La esperanza salió por encima del travesaño

En el minuto 89 de partido, Anita Marcos tuvo la oportunidad de hacer resurgir al esperanza valencianista en una de sus botas. Un pase lateral dentro del área encontró a la «9» libre, prácticamente, en el área pequeña, pero a esta se le hizo diminuta la portería y sacó el balón por encima del larguero. El estadio reaccionó al error de la delantera tanto con decepción como con alivio y dio por finalizado el partido, a pesar de la insistencia granota por encajar algún gol más.

@cris_hernandeez